Torturó y encadenó a un niño hispano durante un año: podría quedar libre la próxima semana

Anthony Waiters fue condenado a tres cadenas perpetuas por abusar de Kyle Ramírez en 2011. Ahora está a punto de lograr su libertad condicional.

Imagen Oficina del Fiscal de Distrito del Condado de San Joaquín

SACRAMENTO, California.- Anthony Waiters, condenado por torturar a un menor de 16 años durante un año en una casa en Tracy, en el condado de San Joaquín, al norte del estado, podría volver a las calles la próxima semana, si se confirma su libertad condicional.

PUBLICIDAD

Waiters fue acusado y condenado a tres cadenas perpetuas en 2011 por torturar y golpear a Kyle Ramírez, un adolescente de entonces 16 años que sufrió todo tipo de abusos físicos.

Aunque Waiters ha permanecido en prisión, el próximo martes 16 de agosto tendrá una audiencia en la que podría obtener su libertad condicional, con lo que estaría de regreso en las calles de Tracy el 19 de agosto.

“Liberar a Anthony Waiters con la concesión de la libertad condicional será un acto de injusticia para la víctima, nuestra comunidad y, también, representaría un riesgo para la seguridad pública”, dijo la fiscal de distrito Tori Verber Salazar.

El riesgo para las víctimas de tortura de Waiters es latente, pues, según la Policía de Tracy, el convicto amenazó de muerte a varias de ellas.

“Ya he sido contactado por testigos en este caso, quienes siguen temerosos de las amenazas de muerte que les hizo Anthony Waiters, quien regresaría a la casa en la que vivía mientras torturaba a Kyle”, aseguró el jefe del Departamento de Policía de Tracy, Sekou Millington, en una conferencia de prensa conjunta.

Anthony Waiters no actuó solo: los detalles del caso

Los actos de tortura por los que Waiters fue condenado no ocurrieron en solitario, sino que el convicto acudió con otras tres personas.

Los hechos de tortura y abuso en contra de Kyle Ramírez fueron cometidos a lo largo de 2007 con la participación de Caren Ramírez, quien entonces había sido acusada de cometer abuso en contra de Kyle.

PUBLICIDAD

Según información del caso proporcionada por la Fiscalía de Distrito del Condado de San Joaquín, Waiters vivía en Tracy y trabajaba en esta ciudad como entrenador de fútbol americano juvenil.

El convicto tenía una relación cercana y de amistad con sus vecinos, identificados como la familia Schumacher; en concreto con Michael Schumacher, con quien acostumbraba consumir alcohol.

En 2007, Caren Ramírez, llevó a Kyle a vivir a la casa de los Schumacher. Para ese momento, el menor no estaba inscrito en ningún distrito escolar ni se le permitía salir de casa.

A finales de ese año, Kyle fue encadenado a la chimenea de la vivienda y torturado rutinariamente con cuchillos, bates de béisbol, sustancias corrosivas y golpeado, tanto por los Schumacher, como por Caren Ramírez y por Waiters.

Golpes, quemaduras y humillaciones antes de poder escapar

Según los testimonios que Kyle dio al jurado durante el juicio, él dormía encadenado en la chimenea, no se le permitía ducharse y cuando se le bañaba se sacaba al patio para rociarlo con una manguera o con agua muy caliente.

Al adolescente no se le permitía comer, por lo que la mayor parte del tiempo permanecía encadenado y atado; según los testimonios vertidos.

En los abusos, Waiters y Schumacher usaban cuchillos de cocina para cortar los brazos del joven o cinturones para golpearlo en el cuerpo. Según se detalló en una ocasión, Waiters lo golpeó hasta noquearlo y el adolescente cayó sobre el fierro caliente de la chimenea, lo que le provocó quemaduras de tercer grado.

PUBLICIDAD

Finalmente, en diciembre de 2008, la víctima encontró la manera de desencadenarse y logró escapar saltando de una ventana a un trampolín y huyendo para pedir ayuda en un gimnasio aledaño a la casa de los Schumacher.

La Fiscalía detalló que existen videos de vigilancia en los que se observa al menor entrando en el gimnasio mientras arrastraba una cadena de su tobillo.

La Fiscalía está pidiendo que no se le otorgue la libertad condicional al convicto.

Mira también: