Los estados de Nueva York y Minnesota demandan al Gobierno federal por recortes de salud

Los estados de Nueva York y Minnesota demandaron este viernes al Gobierno federal por el "recorte abrupto e ilegal" de más de mil millones de dólares anuales que ambas jurisdicciones utilizan para darles servicios de salud vitales a personas de bajos ingresos.

La demanda, presentada por la fiscalía general de ambos estados en un tribunal federal de Nueva York, pide que la corte declare que el Departamento de Salud y Servicios Humanos viola sus reglamentos y obligaciones y que ordene restablecer los fondos a sus denominados Programas Básicos de Salud Estatal.

Los programas son financiados por la Ley de Servicios Médicos Asequibles (ACA por sus siglas en inglés), más conocida como Obamacare, que el presidente Donald Trump y el liderazgo republicano en Senado y Cámara han intentado desmantelar en numerosas ocasiones.

El pasado diciembre el Departamento de Salud informó a Nueva York de su decisión de recortar el 25 por ciento de la financiación que le adeudaba para operar el plan de salud, lo que significó la pérdida de más de 1,000 millones de dólares en fondos federales. Al mismo tiempo, y con los mismos procedimientos recortó los fondos para Minnesota.

"No me quedaré cruzado de brazos mientras el gobierno federal sigue renegando de sus obligaciones más básicas en un intento transparente por desmantelar la Ley de Servicios Médicos Asequibles. Estamos demandando para defender estos fondos vitales y los servicios médicos de calidad, asequible que garantizan a los neoyorquinos", dijo el fiscal general de Nueva York, Eric Schneiderman.

Nueva York y Minnesota son los únicos estados que operan estos programas y en conjunto brindan cobertura médica a más de 800,000 residentes de escasos recursos económicos (700,000 Nueva York y 100,000 Minnesota), indicó la Fiscalía General neoyorquina.

Los estados impugnaron el "corte ilegal" de los fondos federales así como la "incapacidad" del Departamento de Salud "para responder, y consecuentemente su incapacidad para adoptar las propuestas de financiación alternativa" que propusieron.

"El Plan Esencial es un salvavidas para más de 700,000 neoyorquinos de bajos ingresos. La decisión abrupta de recortar estos fondos vitales es un asalto cruel e imprudente contra las familias de Nueva York y no lo permitiremos", agregó Schneiderman.

Ambos estados alegan en su demanda que si se permite que el Departamento de Salud federal continúe con su acción ello causará "significativos daños financieros" a los estados forzándolos a cubrir el "drástico" corte de fondos para evitar poner en peligro programas que proveen acceso de salud a personas de escasos recursos.

"Por cada dólar que Minesota envía a Washington D.C., recuperamos solo 53 centavos", dijo, por su parte, la fiscal general de Minnesota, Lori Swanson.

"Esta demanda busca evitar que Minnesota pierda cientos de millones de dólares en pagos en los próximos años", afirmó.

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