Congresistas y senadores de Florida, junto al gobernador Ron DeSantis, reaccionaron este jueves al plan del nuevo presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, para enfrentar la crisis del coronavirus.
Coronavirus: Díaz-Balart y DeSantis dicen que Florida no necesita del gobierno federal para distribuir las vacunas
El gobernador Ron DeSantis ha dicho que el problema en Florida es el número de dosis de la vacuna y no la distribución, algo en lo que parece coincidir el representante Mario Díaz-Balart. El senador Marco Rubio respalda la decisión de Biden de utilizar una ley federal para impulsar la producción.

Todo esto mientras los políticos de Miami-Dade y Broward piden al gobierno federal que les envíen más dosis de vacunas, pues cada día son más escazas y ya varios centros de vacunación se han visto obligados a poner a una pausa a las citas.
El plan del nuevo gobierno de Biden incluye una estrategia nacional en oposición a la acción autónoma por estado de la pasada administración de Donald Trump.
El presidente Biden firmó 10 órdenes ejecutivas en las que resalta el mandato nacional para el uso de mascarillas en edificios federales, vuelos entre estados, trenes y sistemas de buses.
Biden señaló que el plan hace un esfuerzo de tiempos de guerra, para abordar la escasez en los suministros y estimular la producción de equipos protectores, y todo lo que se requiera para enfrentar la pandemia.
La principal meta del nuevo gobierno es vacunar a 100 millones de personas en sus 100 primeros días, objetivo que para el doctor Anthony Fauci, es razonable.
El nuevo presidente de EEUU también dijo que promueve los viajes seguros, por lo que de ahora adelante las personas que vengan al país deberán tener una prueba de covid-19 negativa, e incluso habló de una cuarentena, aunque no especificó de cuánto tiempo ni cómo sería implementada.
Representantes de Florida en Washington reaccionaron al plan de Biden, algunos mostrándose de acuerdo con las acciones que ha tomado el nuevo gobierno y otros no tanto.
El cubanoamericano Mario Díaz-Balart pareció coincidir con el gobernador Ron DeSantis, quien ha dicho que en Florida ya hay un buen plan de distribución y centros de vacunación, y que el problema es tener suficientes dosis de la vacuna contra el coronavirus.
Por su parte, el senador Marco Rubio, apoyó que Biden usara una ley federal para empujar a las empresas a producir más vacunas.
La epidemióloga de FIU, Aileen Marty, señaló que en su concepto Florida lo puede hacer mucho mejor y que la idea de centralizar la vacunación puede ser la solución.
Este jueves el cirujano general de Florida, Scott Rivkees, firmó una orden que da prioridad a los residentes del estado a recibir la vacuna, requiriendo que de ahora en adelante en todos los centros de vacunación se exija una prueba que demuestre que la persona vive en Florida.









