Francisco Marscha, casi llorando, pedía ayuda en una calle de Los Ángeles cuando fue encontrado por Teresa Zetino y su familia a las afueras de un negocio en la ciudad de El Monte.
Indígena es abandonado en Los Ángeles y ahora busca a su hijo para regresar a casa
No habla español ni inglés, y lo encontraron llorando fuera de un establecimiento tratando de comunicar su situación y pidiendo ayuda para encontrar a la única persona que puede protegerlo.

No habla ni español ni inglés, solo quiché, una lengua indígena guatemalteca. Tampoco tiene el contacto de sus familiares y solo sabe que llegó a Los Ángeles hace 20 días, por lo que pide ayuda de la comunidad para regresar a su casa en Guatemala.
Según Zetino, Francisco le dijo alguien lo contrató para hacer un trabajo de jornalero pero no le pagó, solo lo dejó cerca de la intersección de las calles Durphy y Peck en El Monte, California.
Fernando está desorientado en una ciudad que no conoce y sin poder comunicarse se ve notablemente atemorizado con la situación. Asegura tener un hijo que se llama Manuel, sin embargo, no sabe dónde está, ni cómo contactarlo.
La familia Zetino abrió las puertas de su casa al forastero, donde le han ofrecido hospedaje, comida y abrigo. Además, lo llevaron a la policía para reportar su extravío y ahora lo ayudan a contactar al único familiar que dice tener en Los Ángeles con la esperanza de que el desconocido pueda regresar a su casa.
Los buenos samaritanos también se han comunicado con el Consulado de Guatemala en Los Ángeles a fin de recibir orientación sobre la ayuda que dicha dependencia puede ayudar en estos casos. Al mismo tiempo, hacen un llamado a la comunidad por cualquier información o datos que pueda compartir para lograr la reunificación familiar de Francisco.



