Denuncian que en la morgue incineraron por error el cuerpo de su hijo

LOS ÁNGELES, California.- El sepelio que una familia estaba preparando para darle el último adiós a un ser querido, ya no será posible porque en la morgue de Los Ángeles el cuerpo fue incinerado, denunciaron los padres del difunto.

“Fue un crimen lo que hicieron”, recalcó Mirna Amaya al considerar que lo sucedido es como si su hijo hubiera muerto otra vez.

Los familiares de Jorge Hernández, quien murió a la edad de 26 años en un hospital de Glendale por una enfermedad cardiaca, tampoco tienen la certeza de que las cenizas que les entregaron en la Oficina del Forense de Los Ángeles sean las correctas.

Jorge iba a ser sepultado el martes 17 de octubre, por lo que un día antes la funeraria fue notificada de que el cuerpo ya estaba listo para que lo recogieran, pero después les dijeron que no lo encontraban, señaló el papá del difunto, Jorge Alberto Hernández.

Aparentemente, cuando la Oficina del Forense recogió el cuerpo en el hospital de Glendale, a Jorge le pusieron una etiqueta en la muñeca que lo identificaba como un desconocido, ‘John Doe’, de 115 años de edad.

Para Desiree Marie Morales, quien pretendía fotografiar un tatuaje que tenía quien era su novio, es como si les hubieran quitado el derecho de despedirse por última vez de su ser querido.

En representación de la familia, el abogado Luis Carrillo dijo que el caso será llevado a los tribunales para que se haga justicia.

Univisión se comunicó con la Oficina del Forense, pero no se obtuvo una respuesta inmediata sobre lo sucedido.

Este caso se suma a la serie de problemas que ha enfrentado la Oficina del Forense de Los Ángeles por la falta de personal.

En 2002 se destapó un escándalo porque supuestamente la morgue estaba plagada de ratas y varios cadáveres eran mutilados.

Este año el jefe de la oficina renunció luego de denunciar que la Junta de Supervisores del Condado había recortado el presupuesto, lo que ha provocado un retraso en las autopsia y la acumulación de cadáveres.