HOUSTON, Texas. – Un juez condenó a 40 años en la cárcel a Diego Hernández-Rivera, "Scary", y a Miguel Álvarez-Flores, "diabólico”, dos miembros de la pandilla MS-13 que se declararon culpables del asesinato de Génesis Cornejo-Alvarado, de 15 años, ocurrido en 2017.
Condenan a 40 años en prisión a dos pandilleros de la MS-13 que mataron a una hispana en rito satánico
Génesis Lisbeth Cornejo Alvarado, de 15 años, fue asesinada en el 2017, al 'estilo ejecución', su cuerpo fue abandonado en una calle del suroeste de Houston. Diego Hernández-Rivera, “Scary” y Miguel Álvarez-Flores, “Diabólico” se declararon culpables de su muerte y pasarán 40 años en la cárcel.

“Este es un caso trágico de una niña que se va de su casa y cae en las garras de una pandilla peligrosa y violenta”, indicó Kim Ogg, fiscal de distrito del condado Harris, tras conocerse la condena.
Antes de que comenzará la selección del jurado en su juicio, Hernández-Rivera, de 22 años, llegó a un acuerdo con la fiscalía y se declaró culpable del asesinato de Génesis Cornejo-Alvarado a cambio de 40 años en prisión.
También se declaró culpable de asalto agravado con un arma mortal, a cambio de 12 años en prisión, sentencias que pagará el mismo tiempo, indica el comunicado de la fiscalía.
Por su parte, Miguel Álvarez-Flores, de 26 años, se declaró culpable de asesinato y fue condenado a 40 años tras las rejas.
Los fiscales intentaban demostrar en la corte que Cornejo-Alvarado, salía con un miembro de la pandilla y que fue elegida para ser sacrificada a balazos porque no respetó el templo de la santa muerte.
Historia original
El trágico desenlace de la corta historia de vida de Génesis Lisbeth Cornejo Alvarado, de 15 años, es uno que su madre jamás pudo haber imaginado.
El cuerpo de Génesis apareció tirado en una calle del suroeste de Houston y durante dos semanas nadie supo ni siquiera que se trataba de ella. La jovencita fue baleada al ‘estilo ejecución’, según confirmaron las autoridades.
Permaneció en una morgue sin ser identificada hasta que las autoridades publicaron una fotografía, que tomaron al rostro del cadáver y modificaron, con la esperanza de que alguien la reconociera.
Así fue. Poco tiempo después, alguien asoció la foto con la de una chica que había sido reportada como desaparecida en Jersey Village, un suburbio en el noroeste de Houston.
La madre de la joven, una mujer de origen salvadoreño que pidió no ser identificada, habló en exclusiva con Noticias 45 de Univisión Houston y dijo que había sido contactada por las autoridades la tarde del jueves. Le pidieron que fuera para que confirmara si una jovencita de una fotografía era su hija.
La angustiada madre acudió a la cita, pero nunca se imaginó que la foto que le mostrarían sería la de su hija sin vida. “Nunca me dijeron que estaba muerta”, dijo.
La mujer había hecho un reporte por la desaparición de la adolescente el 19 de enero, pero desde entonces no había tenido noticias por parte de las autoridades. Según relató, tras una discusión con su hija, ella empacó su ropa en una bolsa, agarró su teléfono y se fue de casa sin saber ni siquiera a dónde.
Génesis y su familia llevaban solo 5 meses viviendo en Houston y se acababan de mudar de vecindario. Habían llegado procedentes de Nueva York, donde vivieron durante 4 años.
Cuando la madre reportó que su hija se había ido de la casa, los datos de la menor con su fotografía fueron publicados en la página de internet de personas desaparecidas en Texas (Texas Missing Persons Clearinghouse Online Bulletin) y fue listada como ‘Runaway’.
Génesis nunca regresó a casa y las únicas noticias que la madre tuvo fue de parte de una amiga de ella, quien le contó que la joven estaba con un grupo de pandilleros, quienes al parecer la obligaban a hacer ‘cosas’ que ella no quería.
La madre de la joven está devastada tras saber que su hija fue asesinada. Ahora solo pide que se haga justicia. “Yo lo que quiero [es] que los refundan en la cárcel… pero que no se quede así porque mi hija no es un perro [al] que solo le dieron dos disparos y me la tiraron en la calle”, dijo.
Génesis vivió en El Salvador hasta la edad de 11 años y luego llegó a vivir a Estados Unidos en compañía de su mamá, quien se había separado de ella cuando era muy pequeña.
Detectives del Departamento de Policía de Houston dieron a conocer este viernes que habían logrado determinar quién era la joven que fue encontrada sin vida hace dos semanas en el suroeste de Houston y que ya habían hablado con sus familiares. No quisieron revelan el nombre de la víctima porque están esperando que el médico forense haga la verificación.
Tampoco suministraron detalles del caso porque aún están recopilando evidencia y esperan realizar nuevos arrestos.
Hasta ahora los únicos detenidos como responsables de la muerte de Génesis son Diego Alexander Hernández-Rivera, de 18 años, y Miguel Ángel Álvarez-Flores, de 22, de origen salvadoreño y presuntos miembros de la pandilla MS-13. Ambos individuos fueron imputados con cargos de secuestro agravado y asesinato.
Según información consignada en registros del condado Harris, l os detenidos tienen órdenes de requisición por parte de autoridades migratorias.
Aunque no reveló detalles de cómo estas dos víctimas pudieron escapar o cómo terminaron involucradas con los pandilleros, dijo que muchas menores de edad son influenciadas o manipuladas por miembros de las pandillas y terminan atrapadas en las redes de estos delincuentes.
Una de las adolescentes que logró escapar fue quien denunció las actividades de los presuntos pandilleros, quienes según información consignada en documentos judiciales realizaban rituales de adoración al diablo
En sus declaraciones, la joven sostuvo que estuvo retenida por 18 días, en los cuales la forzaron a consumir licor y drogas y abusaron sexualmente de ella.
Dijo, además, que en el mismo apartamento donde la tenían retenida, vivían seis miembros de la pandilla MS-13 liderados por un hombre conocido con el alias de ‘Diabólico’. En los documentos judiciales dicho alias fue asociado con Miguel Ángel Álvarez-Flores, uno de los detenidos.
La testigo proporcionó otra pista clave con la cual los detectives lograran asociar el cadáver de un joven hallado, con heridas de bala, en un vecindario del suroeste de la ciudad con el de Génesis Cornejo. La adolescente relató que en el mismo apartamento donde estos hombre la mantenían cautiva, había otra joven a quien llamaban Génesis.
Los últimos minutos de vida de Génesis
Según el testimonio de la adolescente que escapó de los presuntos pandilleros, en el apartamento donde la tenían retenida había un santuario dedicado a las creencias satánicas de los miembros de pandilla.
En cierto momento, Génesis expresó su enojo por la adoración al Diablo, según se lee en los documentos que contienen las declaraciones de la testigo.
También describió que Álvarez-Flores, alias 'Diabólico', habría tratado de brindar un cigarrillo encendido a la estatua satánica. Luego dijo a los miembros de la pandilla que ‘ la bestia no deseaba una ofrenda material sino un alma’.
Esa fue la última vez que la testigo vio a Génesis.
De acuerdo con la policía, Hernández-Rivera, el segundo sospechoso detenido, declaró que diabólico le había dicho: “Prepárate, es tu turno”.
Los investigadores dijeron que Hernández-Rivera fue presionado para matar a la chica, a quien sacaron del apartamento bajo el engaño de que iban a encontrarse con un traficante para comprar marihuana.
En el trayecto, los sujetos se detuvieron a un lado de la carretera y según los documentos de la investigación, el líder le pasó un arma a Hernández-Rivera con la que mató a la jovencita al estilo 'ejecución'.


















