Una transacción y tres muertes, es el resultado de una compra-venta de un auto en Fort Worth

FORT WORTH, Texas .- Tras una larga investigación las autoridades siguen revelando detalles sobre el triple homicidio que ocurrió el pasado lunes. Todo inició cuando las autoridades respondieron a una llamada de emergencia para reportar que una de las víctimas estaba desaparecida. los oficiales llegaron al Bill’s Auto Sales ubicado en la cuadra 4230 del Highway 377 South que era el establecimiento en donde trabajaba la víctima identificada como Virginia Lewis. El hijo de Lewis fue a buscarla a su trabajo y vio el auto de su madre pero nadie respondía a la puerta. Cuando este se acercó a la ventana vio rastros de sangre y fue cuando llamó a la policía.

En la declaración jurada, los oficiales explican como lograron entrar al lugar y encontraron a Virginia Lewis en el suelo detrás de uno de los escritorios. Según el reporte había bastante sangre al rededor de su cabeza producto de un disparo.

Los oficiales intentaron localizar a Clayton Turrentine, dueño del lugar y a Veronica Del Jones, otra de las empleadas del negocio; sin embargo, no pudieron localizarlos aunque los carros de ambos seguían en el estacionamiento del lugar. Además las autoridades notaron que la caja fuerte del lugar había sido forzada.

Los oficiales también reportaron haber visto huellas de zapatos con sangre al rededor del negocio, además de la cartera de una mujer y comida servida encima de un escritorio como que alguien se iba a comer.

La hija de de Jones manifestó que su madre le había comentado de un altercado que había tenido su jefe con un individuo llamado “Lamont” tras la compra de un vehículo para Verónica. Al parecer Turrentine le pagó $10,000 dólares por el vehículo pero Verónica no lo quizo por lo que Clay lo puso a la venta. Un comprador se llevó el auto y poco después se dieron cuenta de que el auto estaba en un contrato, Clay tuvo que devolverle 5,000 dólares al comprador lo que dejó a Clay con una pérdida.

Aparentemente esta transacción fue lo que detonó la pelea entre el acusado y el dueño del negocio.

Los detectives rastrearon el GPS de uno de los vehículos que se llevaron los sospechosos del negocio y fue cuando dieron con Andrew Vandermeer, durante la interrogación este manifestó que el culpable de los homicidios fue Lamont; además, de dar detalles de como supuestamente los mató. Posteriormente los oficiales dieron con los cuerpos de las otras dos víctimas en un edificio abandonado cerca del negocio.

Las autoridades interrogaron a Lamont quien negó estar involucrado.

La policía arrestó a Vandermeer de 32 años de edad acusado de homicidio capital. Las autoridades continúan investigando el caso para determinar si hubo más involucrados.

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