AUSTIN, Texas- La policía de Austin arrestó el viernes a un hombre que tomó una pistola de la escena de un homicidio-suicidio en el sureste de Austin.
Revelan nuevos detalles de homicidio-suicidio registrado en gasolinera
Un individuo fue testigo del incidente y corrió al cuerpo para robar la pistola. Según la policía, el sospechoso confesó haber tomado la pistola para luego venderla.

Según informó la policía, alrededor de las 5:30 a.m. del viernes se registró un homicidio-suicidio en la gasolinera Valero en East Riverside Drive, cerca de Montopolis Drive.
Florencio Felix Barron Álvarez, de 43 años, fue encontrado muerto en el suelo frente a un Mazda gris, y la madre de sus hijos Veneranda Martínez Gutiérrez, de 36 años, fue encontrada muerta dentro del automóvil. Sin embargo, no se encontraron armas de fuego en la escena cuando llegaron los oficiales.
Un testigo que llamó al 9-1-1 le dijo a la policía que vio a un hombre disparar contra el Mazda, y luego vio al mismo hombre dispararse con el arma. El testigo también le dijo a la policía después de que Barron cayó al suelo, dos hombres parecieron correr hacia el cuerpo.
La policía indicó que las imágenes de seguridad de la estación de servicio mostraron a un hombre acercarse a la escena antes de irse a pie.
A las 5:15 p.m. de ese mismo día, los oficiales fueron enviados a JD Market en East Riverside Drive. La policía encontró a Christopher Douglas Kempf, de 47 años, en la escena. Los oficiales detuvieron a Kempf porque coincidía con la descripción del sospechoso que presuntamente tomó el arma de la escena.
Cuando se le preguntó si tenía armas, Kempf confesó haber tomado el arma. Los agentes encontraron la pistola en su bolsillo.
Según la declaración jurada, Kempf dijo que vio a un hombre caminando alrededor del auto, apuntándose con la pistola y luego cayéndose.
Kempf dijo que se acercó a la escena y encontró el arma al lado de Barron. Cuando se le preguntó por qué lo tomó, Kempf le dijo a la policía que no tiene hogar y que pensaba venderla.
Kempf fue arrestado y enfrenta un cargo de manipulación de evidencia física y un cargo de posesión ilegal de un arma de fuego.
Martínez y Barron tenían tres hijos juntos que estaban en el automóvil en el momento del tiroteo y vieron cómo ocurría. Familiares y conocidos de la víctima dijeron a Univision 62 que Barron estaba acosando a Martínez por un tiempo y que ya se había alertado a la policía sobre el caso.









