Llegamos al séptimo mes, esta es tu semana 25 de embarazo, y ya estás entrando en la recta final. Ya no resta casi nada para que puedas acunar a tu criatura, darle de mamar, y también despertarte en mitad de la noche preocupada por cómo esté. Como toda etapa, tiene sus cosas buenas y sus cosas no tan buenas, pero para que todo surja con la mayor tranquilidad, lo mejor es estar informada y preparada.
Semana 25 de embarazo

Ya en esta etapa del embarazo, tu pancita tiene un gran tamaño, tu bebé es cada vez más grande y pesa más, por lo que puede ser normal que sufras de dolores lumbares incluso de siática. Esto ocurre generalmente cuando la cabeza del bebé presiona sobre la pelvis, tocando los nervios que llevas allí y generando el dolor, que puede comenzar en la parte baja de la cintura y avanzar hacia tus piernas.
Algunos consejos para aminorar los dolores, es colocarte en esa zona una bolsa de hielo o de agua caliente durante 10 minutos. También recuerda que es muy importante que duermas en un colchón firme, en lo posible intenta dormir de costado y con un pequeño almohadón entre tus rodillas. Otra recomendación es evitar estar sentada por largos períodos de tiempo. Cada media hora levántate y camina algunos pasos. No te agaches a recoger algo del piso bruscamente, si no tienes a nadie que lo haga por ti, recuerda agachar todo tu cuerpo, torciendo las rodillas, y no doblándote desde la cintura. Es muy aconsejable que hagas algunos ejercicios especiales para embarazadas.
Pero mejor concentrémonos en qué le sucederá a tu bebé en esta semana 25 de embarazo, su séptimo mes desde su concepción. Seguirá midiendo aproximadamente 30 cm de longitud, y pesando ya caso 700 gramos. Ya tu pequeño bebé cuenta con sus pestañas, aunque aún el color de su iris no está resuelto, es más incluso necesitará de la luz una vez que nazca, para completar su pigmentación, por lo que es normal que su color de ojos pueda variar algo durante sus primeras semanas de vida.
Recuerda que ya desde hace algunas semanas tu bebé tiene completamente desarrollado el sentido del oído, por lo que es bueno que utilices música o le cantes, para generar un vínculo desde antes de nacer.









