¿Quieres saber qué es lo que realmente le apasiona a tu bebé? ¿Quieres saber con qué juegos se divertirá más? Cuando tu bebé ya está rondando el año no es necesario que le regales infinidad de juguetes o que le prepares actividades complicadas para estimular su atención, ya que es lo más sencillo lo que le hará divertirse y pasarlo bien.
¿Qué es lo que más le divierte a un bebé?

Luego de cumplir su primer año, tu bebé empezará a convertirse poco a poco en niño y necesitará conquistar más espacio de su alrededor, ya sea a gatas o andando. Además, el desarrollo del lenguaje también aparecerá en esta etapa y con su descubrimiento diario del mundo, ¡la diversión y el entretenimiento estarán asegurados!
Curiosear para ver qué hay
El niño pequeño es curioso por naturaleza y que lo sea demuestra que es un niño sano. Deja que tu hijo sea todo un explorador ya que eso resulta imprescindible para su buen desarrollo cognitivo y para que sea él mismo quien empiece a conocer los límites del entorno, claro está siempre bajo tu supervisión.
A un bebé de casi un año de edad le encanta descubrir todo lo que está escondido, como mirar dentro de cajas, cajones, agujeros e ¡incluso el inodoro! Por eso, en esta etapa es cuando llega el momento de proteger los cajones, los enchufes, las estanterías, y ocultar de su vista los productos tóxicos y las medicinas.
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Los animales
Los animales son, para todos los bebés, un espectáculo de diversión, ya sean pájaros, mamíferos, insectos... ¡todos los seres vivos! Ya sea por los colores y movimientos, cualquier animal les fascinará.
Un juego que les encanta a los más pequeños es imitar los sonidos que hacen los animales, así como aprender los nombres, los sonidos, las partes del cuerpo del animal... si es en vivo les encanta, pero con imágenes también. A la edad de 1 año es una buena época para enseñar al pequeño el respeto por los animales y que son criaturas que tienen derecho a vivir, que sienten y que deben recibir el cariño de las personas.
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Subir por todos lados
En cuanto las capacidades motrices del bebé empiezan a ir en aumento, tanto con el gateo como con la marcha, sólo quiere utilizar su cuerpo -y lo necesita- para practicar sin parar y mejorar su desarrollo motor.
Es seguro que acabarás agotada puesto que irás detrás suyo durante todo el día, pero no limites su afán de desplazamiento y de moverse por sí mismo en búsqueda de nuevas experiencias. Deja que se mueva a sus anchas siempre que haya oportunidad, no te preocupes por los chichones ya que son normales y totalmente inevitables.
Como has podido leer, los bebés pueden llegar a divertirse y pasarla mejor en contacto con la naturaleza y con los objetos del hogar. Así que no te preocupes si este mes no le has comprado ningún juguete nuevo, tal vez lo que tu hijo está esperando es que le permitas trepar a un sillón repleto de cojines mullidos para lanzarlos al piso, o pasarse un largo rato tratando de imitar el sonido de su perro.









