Los primeros golpes, caídas y nanas de los bebés

A medida que mi bebé fue creciendo fue ganando autonomía, en la actualidad es un pseudo salvaje que corre desaforado por todos lados, pero, en algún momento fue un bebé chiquitito al que podía tener en brazos y se quedaba quietito donde lo dejara.

Cuando empezó a moverse, girar y después gatear y luego caminar, comenzaron los problemas... ya no podía dejarlo sobre la cama o el sofá sentadito e ir corriendo al baño, o a apagar la cocina.

Los primeros golpes o caídas del bebé son terribles para los papás. Yo solía salir corriendo a ayudarle, pero con el tiempo me fui dando cuenta de que son casi que “a prueba de golpes”. bueno, no es tan así, pero la verdad es que una caída que para un adulto puede ser terrible los peques la soportan bien.

Las primeras caídas del bebé

Los peligros están por todos lados, desde la punta de una mesa o mueble hasta un enchufe o la puerta, todo lo que nos rodea puede ser peligroso para un bebé con ansias de conocer.

A medida que ellos comienzan a andar nuestra casa va mutando en la decoración, ya no hay libros a menos de 1 metro de altura, ni adornos, electrodomésticos y plantas.

La verdad es que uno se va dando cuenta de cómo prevenir accidentes prestando atención a las cosas que le atraen o quieren tocar pero no deben. Tener en cuenta algunos tips para prevenir accidentes en casa obviamente nos puede ayudar, pero creo que cada niño es diferente así que hay que ver qué cosas le atraen más.

Creo que son pocos los bebés que no se han caído alguna vez de la cama o el sofá. Lisandro, mi hijo, se cayó del sofá, lo peor es que estábamos al lado de él y no lo miramos un segundo, segundo en el cual se dio vuelta y rodó. Cuando se golpean la cabeza recomiendan no dejarlos dormir, así que evitamos que se durmiera, pero fue tanto el susto que nos dimos que terminamos en la emergencia para que lo revisaran; no fue nada por suerte, pero muchas veces la culpa es tan grande que uno se preocupa más de lo que la situación requeriría.

Cómo reaccionar cuando nuestro bebé se golpea o cae

Ahora que mi bebé está a unos pocos pasos de ser un niño ya no salgo corriendo a ayudarle, por lo menos cuando veo que no fue algo terrible. Trato de que en la medida de lo posible se levante y recupere solito, pero el 98% de las veces viene a mi lado para que le cante sana sana, obvio que no se lo niego, ¡un sana sana no se le niega a ningún niño!

Por ahora venimos safando de las nanas, esperemos seguir así, un diente quebrado es más que suficiente para sentirse mal, pero con un varón bastante movedizo es casi imposible prever que nos depara el futuro.

Y tu, ¿cómo manejas las nanas y caídas de tus peques? Yo ya estoy pensando en cómo armar un botiquín de primeros auxilios.

Nos encontraremos la próxima semana en nuestro espacio De mamá a mamá donde te compartiré otras de mis experiencias como madre.