Muchas veces las noticias nos sobresaltan, aunque sean de latitudes muy distantes; terremotos, inundaciones, ciclones y huracanes, tsunamis, derrumbamientos, sequías. Nuestro planeta está en estado de alerta, nos envía señales de auxilio, que parecen por momentos no ser escuchadas. Lugares donde antes abundaba la vegetación, hoy son páramos desiertos; los polos se derriten a pasos agigantados, escurriendo las esperanzas de un futuro prometedor. Nuestro planeta tiene las venas abiertas, parafraseando al escritor Eduardo Galeano, se desangra a cada instante, en cada vuelta que gira alrededor del sol.
Enseñar a los niños el cuidado del medio ambiente

Aunque los gobiernos tienen la responsabilidad de establecer políticas de cuidado ambiental y preservación de los recursos naturales, todos podemos aportar y contribuir, porque la suma de los pequeños esfuerzos y gestos han logrado en la historia de la humanidad los grandes cambios, las grandes revoluciones.
Hoy EntrePadres se viste de verde y te brinda consejos para enseñar a los niños sobre el cuidado del medio ambiente desde el hogar.
La importancia del reciclaje
Todos podemos colaborar con el reciclaje de las cosas, paso elemental para el cuidado de los recursos naturales. Para poder reciclar es importante destinar un lugar de la casa, como una especie de depósito, donde puedas colocar artículos para reciclar.
Separar los residuos es el punto de partida para comenzar con las tareas del reciclaje. El papel tarda en descomponerse alrededor de cuatro meses, siempre y cuando no esté dentro de una bolsa de plástico. Ten en cuenta que si recicláramos una de cada diez toneladas de papel que utilizamos por año, salvaríamos 25 millones de árboles.
Separa los plásticos y los envases de vidrio; el plástico tarda en descomponerse 400 años, mientras que al vidrio le llevará hasta un millón de años.
Otras formas de caricias para el planeta
No sólo desde el reciclaje se contribuye con el medio ambiente. Hay otras maneras que todos podemos instrumentar en nuestro hogar. Alienta a tu familia a cuidar el agua, cerrando los grifos de las canillas cuando no es necesario que corra el agua, por ejemplo, mientras nos cepillamos los dientes; optimizando el tiempo de la ducha y el funcionamiento correcto de las canillas.
Tomar las mismas medida con el consumo de la electricidad, manteniendo las luces apagadas cuando no se necesitan, utilizar bombillas y tubos de bajo consumo, etc.
Cultivar alimentos orgánicos, como frutas, verduras, hierbas en un rincón de tu jardín también es una manera de contribuir con el cuidado del medio ambiente.
Podemos mirar para otro lado, podemos hacer oídos sordos, podemos tomar la actitud más fácil, que es la de no comprometernos. Pero sólo tenemos un planeta, que se llama Tierra y que nos necesita, nos necesita para seguir latiendo con los compases de un universo, que mantenía el equilibrio, hasta que el hombre intervino irresponsablemente. Siempre hay tiempo para comprometerse, para involucrarse, y esta es la mejor herencia que podemos brindarle a nuestros hijos.
Para que podamos seguir maravillándonos con los ocasos en las playas mansas; para que nos podamos seguir asombrando con la majestuosidad de los saltos de las ballenas en los océanos; para que el aleteo de los ruiseñores no quede simplemente en el recuerdo de un video de Youtube para las generaciones futuras.
Es tiempo de hacer algo. Es tiempo de descuento. El planeta espera...y desespera.









