¿Cuándo empiezan las náuseas en el embarazo?

Las náuseas en el embarazo son una de las cosas más molestas de este momento tan maravilloso en la vida de una mujer. Sin embargo, a pesar de que es algo común, hay muchas formas de hacerle frente y poder sentirnos lo mejor posible durante esta etapa tan bonita. ¿Quieres saber todo sobre las náuseas en el embarazo?

¿Qué son las náuseas en el embarazo?

La náuseas en el embarazo empiezan generalmente -y también son más fuertes durante este período- en el primer trimestre de embarazo. Pueden darte durante el día o la noche, eso es independiente, y es una sensación de náuseas que por momentos pueden acabar en vómitos. En general, comienzan por la mañana, pero no desaparecen a medida que pasan las horas, aunque sí solemos recibir un alivio entre la semana 12 y 14.

Ten en cuenta también que las náuseas suelen ser peores durante el primer embarazo, y la buena noticia es que no tienen ninguna repercusión para el bebé. Incluso mejor: aquellas que sienten náuseas durante el embarazo tienen menos probabilidades de un aborto involuntario que quienes no las sienten.

Estas náuseas son causadas por una combinación de cambio hormonal, estrés y otros cambios en el cuerpo -por ejemplo, un sentido del olfato más refinado-, que en conjunto pueden afectar a la mujer en los primeros meses de embarazo. El aumento de los niveles de las hormonas hCG y estrógeno, la relajación de los músculos del tracto digestivo debido a los altos niveles de progesterona. El rápido estiramiento de los músculos uterinos, así como también saltarse las comidas o tener aversiones a algunos alimentos durante el embarazo pueden contribuir a la sensación de vacío y las náuseas.

¿Cómo puedo mejorar las náuseas en el embarazo?

Hay muchas formas de controlar las náuseas en el embarazo: en primer lugar, puedes consultar con tu médico sobre algún medicamento aprobado para mujeres embarazadas. Existen diferentes opciones y tal vez es lo que te aliviará más rápidamente el malestar.

Debes seguir una dieta específica llena de proteínas y carbohidratos complejos que evitarán que tengamos náuseas. Come todos los alimentos que te resulten atractivos, aún si son siempre los mismos, y evita comer, oler o pensar en aquellos que te dan náuseas.

Busca aquellos alimentos que tengan bastantes nutrientes y no te hagan mal al estómago, no tengas miedo de lo que comas porque seguramente tu bebé estará bien nutrido.

Lo ideal es que repartas la alimentación entre cuatro y seis comidas pequeñas, ya que cuando tu estómago está completamente vacío, los ácidos no tienen nada que hacer y por ende pueden aumentar la sensación de náuseas. Además, las comidas pequeñas son más fáciles de digerir.

Come en la cama: en esta ocasión está perfectamente permitido, es más, es una obligación. Antes de irte a dormir consume unos cereales o galletitas saladas, para que tu estómago no esté tan vacío cuando te levantes. Incluso puedes comer algo si te despiertas por la noche. Si no te animas con las cosas sólidas, puedes probar alimentos líquidos como sopa, batidos y jugos.

Intenta incluir el jengibre en tus comidas -una buena opción es el ginger ale-, consume tus vitaminas en la mañana a excepción del hierro, prueba la acupresión, yoga prenatal, técnicas de respiración y cualquier otra práctica que disminuya el estrés.

¿Sabías cuándo empiezan las náuseas en el embarazo? ¿Has sufrido las mismas? ¿Cómo has solucionado el problema?