Comprender cómo usar los juegos para educar puede significar una gran ventaja y apoyo para los niños por parte de los padres, sin que esto signifique que tenemos que tener conocimientos de docencia.
Cómo usar los juegos para educar

Seguramente lo habrás podido comprobar por ti mismo en algún momento de niño, o hasta quizá de adulto; cuando debemos aprender ciertas cosas, encontrar el lado lúdico, didáctico, cómico y hasta un tanto insólito, puede facilitarnos el entendimiento.
Es como si le restara seriedad e importancia al tema, y por medio de una teoría llevada a la práctica en forma de juego, la educación es mucho más amena para todos.
Enseñar por medio del juego no es nuevo
Personajes reconocidos como Lev Vygotsky, Jean Piaget, y Mihaly Csikszentmihalyi, destacaron la introducción de juegos como parte sustancial para acceder y hacer crecer el pensamiento creativo abstracto y la consecución de metas infantiles que todavía no han podido llevar a cabo en su vida.
Para verlo más claro, los niños imitan ciertas actividades que no les es posible llevar a la práctica por diversos motivos; por ejemplo, una niña a la que no le es posible elaborar y cocinar una tarta, juega con tierra y recipientes para emular un rol de adulto.
Otros, como Platón, ya tenían el concepto de educar jugando dentro de sus cabezas y también lo llevaban a la práctica con sus alumnos.

Actualmente, se hace hincapié en incorporar desde el juego aspectos relacionados a:
- La narrativa
- Colaboración social
- Rendimiento
La realidad es que los juegos han cambiado mucho gracias a la intervención de las nuevas tecnologías, y aunque diferentes a los de antaño, la variedad de juegos es increíble y puestos a la orden de la educación su valor puede ser muy importante. Ejemplo de ello es el juego de Los Sims en donde una serie de responsabilidades relacionadas con el hogar, los niños, el trabajo y las mascotas promueven el aprendizaje del buen uso del tiempo y el mantenimiento de la casa con todo lo que implica. Los juegos electrónicos aportan una gran riqueza a la hora de educar a través de los juegos, ya que permiten acceder a un universo de posibilidades como conocer el océano, el espacio, la geografía, distintos escenarios del mundo entre otros muchos.
Educando a través de los juegos
Los juegos al aire libre, en plena naturaleza permiten recrear situaciones reales en las que se puede introducir el juego perfectamente.
De igual modo fomentar los juegos en donde los niños asumen e intercambian distintos roles, es una forma muy buena de que capten diferentes situaciones y personalidades de modo lúdico y a través de la interpretación. Una manera más profunda de hacerlo es proponiendo objetivos a cumplir dentro del juego pero a largo plazo.

Los grupos mixtos en donde hay niños que saben más que otros y a su vez subgrupos de igual o similar nivel de conocimiento, enriquecen las actividades y el aprendizaje social; aquí es importante motivar la cooperación y el intercambio de opiniones para la apertura de un debate.
La enseñanza a través del juego podríamos decir que aún se encuentra en pañales; hay mucho por avanzar, descubrir e introducir, pero lo importante es que ya existen modelos experimentales para ir mejorando la educación por medio del juego.









