Siempre pensamos que somos nosotros quienes le enseñamos muchas cosas importantes de la vida a nuestros hijos, pero ellos también nos dan alguna que otra lección para recordar. Y es que los niños ven la vida de una forma que nosotros ya olvidamos; son ingenuos, sencillos, valientes, y todavía permanece en ellos esa linda capacidad de asombro. Estas son algunas de las enseñanzas que aprendemos de nuestros hijos que valen mucho más de lo que uno cree.
8 enseñanzas que podemos aprender de nuestros hijos


#1 Sonreír todos los días
Cuando llegas a casa con esa cara amargada porque tuviste un mal día en la oficina, son tus niños los que te sacan esa sonrisa que tanto necesitabas. Es que para ellos no existe el día sin risa, no existe el día sin diversión; para ellos la felicidad no es un objetivo, es un estado de ánimo.

#2 Cultivar la amistad
A mi siempre me ha sorprendido la facilidad con la que los niños se integran y pueden hacer nuevos amigos, ya sea en una fiesta de cumpleaños, en la sala de espera del pediatra o en el nuevo día de escuela. Quizás podamos seguir su ejemplo un poco más y hacer nuevos amigos hasta en la cola del supermercado; hay mucha gente por ahí que vale la pena conocer.

#3 Ser heroína
En todas las historias que los niños cuentan ellos son los héroes, los que salvaron el día. Quizás de adultos esto nos parezca una actitud egocéntrica pero hay que verlo desde otro punto de vista, creer es poder. Una cosa es que seas modesta y humilde, y otra muy distinta es que creas que eres mediocre y no puedes lograr cosas importantes. Sigue el ejemplo de tus hijos y sé una heroína.

#4 Crear genera felicidad
Cómo disfruto de ver a los niños perdiéndose en un dibujo o una manualidad, ¿y tú? Hacer un castillo en la arena, pintar, y construir un fuerte con sábanas son todas expresiones de creatividad que nosotros deberíamos imitar en nuestro día a día. Imaginar y crear saca lo mejor de nosotros, entonces, ¿por qué abandonar estas tareas cuando somos mayores?

#5 Intentar cosas nuevas
Nuestros hijos nos enseñan que siempre se puede intentar algo nuevo; ellos no le tienen miedo a saltar en un trampolín, comenzar a practicar un nuevo deporte o aprender a andar en bicicleta aunque se tropiecen mil veces. ¡Aprendamos de su ejemplo y hagamos algo nuevo todos los días!

#6 Notar las pequeñas cosas
¿Cuántas cosas hermosas damos por sentado? ¡Millones al día! La sonrisa de un niño, el saludo de buenos días, el señor que nos abrió la puerta del taxi o el florecer de los árboles en primavera son cosas a las que uno ya no le presta atención. ¿Cuándo fue que dejamos de ver lo maravilloso que nos rodea?

#7 Ser activas
Para los niños salir a jugar afuera es lo más lindo que pueden hacer en el día, ensuciarse con barro y saltar los charcos. Y todo eso lo hacen sin pensar si es saludable, si es hacer deporte o si necesitan ejercitarse; seamos más activos sin tomarlo como una responsabilidad y disfrutemos más.

#8 Cada día es un nuevo comienzo
¡Si solo pudiésemos olvidar los rencores y tomar cada día como un nuevo comienzo! Nuestros niños nos muestran que cada mañana es una nueva aventura y que no se puede estar enojado una semana con otra persona. ¡Gran enseñanza!
¿Y tú, qué otra enseñanza has aprendido de tus hijos? Cuéntanos.
Sigue leyendo: Lecciones que nuestros hijos nos enseñan.









