5 cosas que JAMÁS deberías decirle a una mamá que perdió su embarazo

¿Alguna vez pasaste por la dura experiencia de un aborto espontáneo? ¡No se lo deseo a nadie! Para colmo de males, la gente intenta consolarte pero realmente no sabe qué decir. Y por eso a veces dice cosas terribles.

En un intento de evitar que esto siga sucediendo, hice esta pequeña recopilación de 5 cosas que jamás deberías decirle a una mamá que perdió su embarazo. 

1. Ya vas a tener otro

Es posible. Y es posible que esa mamá ya tenga otro, también. Pero, sinceramente, ¿crees que los hijos son reemplazables? Esa mamá NO QUIERE OTRO. Quiere a SU bebé.

2. Fue por tu bien

Aunque el embarazo se viera interrumpido a causa de los problemas de salud de la madre y esto de alguna manera haya traído algún beneficio oculto a su deteriorada salud, ¿realmente crees que una madre puede llegar a pensar que la muerte de su hijo es algo que en algún punto podría beneficiarla? ¡Esto sí que es un disparate total!

3. Era un embarazo de muy poquito tiempo

Para ejemplificar lo que esta madre podría sentir al oír esto, en lugar de pensar en términos de meses piensa en términos de años. Si a una madre se le muriera un hijo de nueve años, ¿le sería permitido llorarlo? ¿Y si el niño tuviera dos años? Sí, ¿verdad? ¿Y qué hay de llorar a un hijo de nueve meses? ¿Y de dos meses de vida intrauterina? TODOS son hijos. Todos son seres humanos. Y eso es lo que sabe y siente esa mamá, sin importar a qué edad su pequeño hijo dejó de existir.

Ver más: 7 causas de un aborto involuntario

4. Fue por el bien del bebe, está en un lugar mejor

¡Horror! ¿Al decirle esto a la madre la gente quiere soslayar que el bebé no iba a estar bien con ella? Seguro que esa no es la intención. La madre no se sentirá nada bien al pensar una cosa como esa, ¿verdad? ¡Entonces a no decirlo, por favor!

5. Dios se lo llevó

Cualquiera sea tu religión, no creo que pienses que Dios mande gente al mundo para hacer ilusionar a sus padres durante unas breves semanas y luego quitárselos. Los abortos espontáneos (y el resto de las muertes también) suceden por la imperfección del cuerpo humano o por un accidente. No metamos a Dios en esto. Él existe para cosas mucho, mucho más sublimes.

Si no sabes cómo dar consuelo a una mamá que sufrió un aborto espontáneo, mejor omite palabra alguna y abrázala muy fuerte. Y para cuando vuelva a quedar embarazada, no se te vaya a ocurrir decir alguna de las 6 cosas que las embarazadas no quieren escuchar.