Tu metabolismo se enlentece con los años: consejos fáciles para acelerarlo
El envejecimiento es inevitable: incontables cambios sucederán en nuestros cuerpos desde el momento en que nacemos hasta que llegamos a la tercera edad. Uno de los cambios más significativos es el enlentecimiento del metabolismo, especialmente cuanto más se acercan los 30 o los 40 años.
¿Qué es el metabolismo? De acuerdo a la Mayo Clinic, el metabolismo es el conjunto de todos los procesos químicos por los que el organismo convierte la comida en la energía que necesita. En ellos se incluyen la quema de grasas y la quema de calorías, tan importantes cuando queremos bajar de peso. Cuando las personas hablan de su metabolismo, en realidad se refieren a su ritmo metabólico: la cantidad de energía (o calorías) que gastan en reposo o haciendo ejercicio.
El ritmo metabólico está conformado por varios factores, según Healthline. La cantidad de calorías que quemas cuando estás descansando o durmiendo es la mínima cantidad de intercambios químicos para mantenerte viva, al menos por un tiempo. También gastas energía digiriendo y absorbiendo los nutrientes de la comida: usualmente este gasto ocupa el 10 % de las calorías quemadas en todo el día.
Además, no todos los cuerpos gastan la misma cantidad de energía haciendo ejercicio, así que eso contará para tu facilidad o dificultad para perder peso. Por último, hay actividades que no son ejercicio pero queman calorías: mover tus manos cuando estás nerviosa, estar de pie, lavar los platos y hacer otras tareas de la casa. No todas las personas queman la misma cantidad de calorías haciendo las mismas tareas.
¿Por qué el metabolismo se vuelve lento con la edad?
Muchos son los factores que forman parte de tu metabolismo y determinan su velocidad. Además de los ya mencionados, la cantidad de músculo que tengas, tu altura y los niveles de diferentes hormonas incidirán también en ese ritmo. Hay algo que todos tenemos en común, y es que, tengamos el ritmo metabólico que tengamos, adelgazar se nos irá haciendo más difícil con el paso del tiempo. ¿Por qué esa condena?
Pierdes músculo con la edad
El adulto promedio pierde de 3 a 8 % de masa muscular a medida que envejece. Algunos estudios longitudinales han comprobado que las personas de 80 años tienen 30 % menos músculo que cuando tenían 20. Cuando envejeces, pierdes músculo: ese es el mecanismo que reduce el gasto de energía.
Esta gran pérdida de músculo que viene con la edad se conoce en el ámbito médico como sarcopenia. A medida que envejecen, y hacia la menopausia, las mujeres experimentarán una reducción en sus niveles de estrógeno. En los hombres habrá una reducción de la testosterona. Todo esto se traducirá en más grasa y menos músculo, o lo que es igual, menos energía gastada.
Algunos procesos metabólicos se detienen
De acuerdo a Healthline, dos componentes celulares son los responsables de la quema de calorías en reposo: las mitocondrias y las bombas sodio-potasio. Las primeras crean energía para las células. Las segundas ayudan a producir impulsos nerviosos que causan las contracciones musculares, en las que están incluidos los latidos del corazón. La investigación que hay disponible al respecto demuestra que ambos procesos pierden su eficiencia con la edad, y por eso enlentecen tu metabolismo.
Te vuelves más sedentario
Muchas personas no se dan cuenta, pero terminan siendo mucho menos activas a los 40 años que a los 20. Hay estudios que demuestran que las personas pasan mucho menos tiempo ejercitándose a los 50 que en etapas anteriores de su vida. Lo bueno es que la receta para acelerar el metabolismo es hacer más ejercicio.
Cómo acelerar el metabolismo y contrarrestar el proceso
Por suerte, hay mucho que puedes hacer para acelerar tu metabolismo y evitar los estragos de la edad en tu cuerpo. Primero que nada, para aumentar la cantidad de calorías que quemas en reposo y haciendo ejercicio, debes aumentar la masa muscular. Para esto lo recomendable es hacer entrenamiento con pesas. Para que el músculo se reponga, déjalo descansar por 48 horas.
Llevar una alimentación adecuada también te ayudará a ganar músculo, especialmente si incluyes bastantes fuentes de proteína en tu dieta. Asimismo, puedes incluir grasas saludables, ya que tanto estas como la proteína necesitan más energía para digerirse en el organismo.
Bebe entre uno y dos litros de agua por día, duerme 8 horas o más cada noche y asegúrate de permitirte suficiente comida y no menos: mantener el metabolismo rápido lleva trabajo duro, pero al final del día es tan sencillo como vivir saludablemente y escuchar a tu cuerpo.
Lee también: