Tanorexia: Cuando el bronceado nunca es suficiente
Uno de los trastornos más habituales en dermatología es aquel que se asocia al bronceado cuando éste sobrepasa los límites establecidos. Muchas personas no toman consciencia de hasta qué punto es aceptable estar bronceado, y que sobrepasar este límite puede llevar a problemas gravísimos como puede ser el cáncer de piel.
Algunas de estas personas son las que vemos bronceadísimas en pleno invierno y que se broncean a lo largo de todo el año (sea de forma natural o en camas solares). Esta tendencia tiene un nombre en dermatología: Tanorexia.
La Tanorexia es altamente común en nuestra sociedad, y sobretodo se da en mujeres. Cuando a pesar de estar bronceado uno se ve siempre blanco ante el espejo y considera que necesita más sol para sentirse bello y agradable consigo mismo la Tanorexia está indudablemente instalada entre nuestras patologías.
Muchos han sido los factores que han ido haciendo esta tendencia común. Las deplorables camas solares son un ejemplo de ellos, y desde luego que los gimnasios que combinan ejercicio con bronceado también integran esta lista.
Hay que tomar consciencia de que con algunas cosas no se puede jugar. El sol es una de ellas, y si decides tomar sol hazlo siempre en períodos prudentes y en los horarios permitidos. No sólo tu piel está en juego, sino que tu vida misma corre peligro a mediano plazo.
Vía | VivirMejor