Con la llegada del calor tomar un poco de sol se vuelve cosa de todos los días. Y no hace falta que estés de vacaciones tirada en la playa o tomando sol en una pileta. En los últimos años, proteger la piel del sol se volvió una obligación en todo momento y lugar, incluso en la ciudad.
Radiación ultravioleta: Qué es exactamente y cómo debemos protegernos
Por:Jime Sabbag
Pero cuando hablamos de radiación ultravioleta no siempre estamos muy seguras de qué es. Saber un poco más de qué se trata es lo que nos va a ayudar a cuidarnos como corresponde.
En este artículo de iMujer te contamos qué es la radiación ultravioleta y cómo debemos protegernos de ella.
Qué es la radiación ultravioleta
La luz UV (Ultra Violeta) se presenta en tres formas:
- Ultravioleta A (UVA)
- ultravioleta B (UVB)
- ultravioleta C (UVC)
La luz UV integra parte de los rayos solares y produce varios efectos en la salud. Se la denomina violeta porque es el color con el que los humanos identificamos dichas longitudes de onda.
Veamos de qué se trata cada una: aunque la UVB proporciona la energía que la piel necesita para elaborar vitamina D, es también responsable del daño directo de nuestra piel. La UVA también contribuye al daño cutáneo, especialmente al envejecimiento prematuro. La UVC es bloqueada por la atmósfera terrestre y, en consecuencia, no llega hasta la piel.
Imagen thinkstock
Cómo protegernos
La luz solar puede causar eritema solar, envejecimiento cutáneo prematuro, daño ocular, debilitamiento del sistema inmunitario, reacciones fotoalérgicas y fototóxicas e incluso cáncer de piel.
La cantidad de luz UV que entra en contacto con la piel depende de varios factores: el momento del día, la estación, la altitud y la localización geográfica. Durante periodos de radiación UV intensa - al mediodía o en un día de mucho calor de verano- lo recomendable es utilizar ropa protectora y aplicarse filtro solar antes de salir al exterior.
Tener en cuenta el momento del día en el que nos exponemos y de qué forma lo hacemos es clave. Aplicar el protector varias veces al día (se recomienda cada dos horas) y más aún si nos metimos al agua.
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No tenemos que pasar por alto la importancia de la protección solar. Aplicar un filtro adecuado para nuestro tipo de piel es fundamental para un buen cuidado.
¡Atenta! Cuidate como tu piel lo necesita y aplicá filtro solar aunque NO estés tomando sol intencionalmente. El simple hecho de estar expuesta podría estar dañando tu piel.
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