Homeopatía infantil: consejos

La homeopatía como medicina alternativa es una práctica que ha tenido un gran crecimiento en la última década. Se calcula que una de cada cuatro consultas a homeópatas corresponde a pacientes niños entre 0 y 9 años de edad.

La homeopatía infantil esta en auge, una de las razones de esto es que se trata de un sistema de medicina alternativa que utiliza remedios totalmente naturales y sin ingredientes químicos activos. Las sustancias empleadas producen efectos similares a los síntomas de la enfermedad o problema de salud a tratar y de esta manera se activa la respuesta del organismo para enfrentar el problema.

La homeopatía infantil es una de las terapias alternativas con mayor aceptación entre los padres, esto seguramente se debe a que muchos padres entienden que es una medicina alternativa totalmente segura, inofensiva y que carece de efectos colaterales.

Los problemas de salud más comunes que son tratados con éxito en niños son muchos: asma, alergias, cólicos, eczemas, desordenes de conducta, otitis y diarrea. Cualquier tipo de enfermedad o trastorno de salud, ya sea agudo, crónico o leve. De todas maneras se recomienda realizar una consulta médica antes de comenzar un tratamiento homeopático.

Una consulta a un medico homeópata incluye, como primer paso, una extensa entrevista con los padres, se intenta obtener toda la información posible de todos los aspectos relacionados con el niño. Su historia clínica, su conducta, preferencias alimentarías, patrones de sueño y su entorno.

A partir de estos datos, el homeópata realiza un perfil del paciente y determina el tratamiento a seguir que es único y personalizado para cada paciente.

Pese a que los remedios homeopáticos son de venta libre, es aconsejable no automedicarse y consultar con un homeópata. Y con mucha más razón si ya se esta bajo algún otro tipo de tratamiento. Los resultados pueden observarse luego de las primeras sesiones, de no ser asi se debe acudir a un medico de inmediato.