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Conoce el tipo de depresión que puede aparecer tras un gran cambio en tu vida

Una idea que poco a poco se vuelve más nítida es que la depresión toma muchas formas, tantas como personas que existen en el mundo. Muchas veces puede ser invisible; otras, puede saltar a la vista, pero lo cierto es que en todos los casos identificar de forma temprana la enfermedad es esencial para aliviar los síntomas.

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¿Qué es la depresión situacional?

La depresión situacional se encuentra dentro de los llamados trastornos de adaptación, que ocurren como respuesta a un trauma o situación estresante, como puede ser la pérdida de un ser querido, una separación, una enfermedad, un despido o cambios importantes en el estilo de vida, como jubilarse o tener un hijo.

Este tipo de depresión, a diferencia de la depresión clínica, se caracteriza por tener una «causa», es decir, una situación que podemos considerar como desencadenante. Para ser catalogada situacional, los síntomas deben aparecer antes de transcurridos tres meses desde el evento que le dio inicio.

A diferencia de este escenario, la depresión clínica no siempre tiene una causa aparente, y sus síntomas pueden llegar a ser más agudos. Es importante, sin embargo, que se trate una depresión situacional a tiempo, ya que la enfermedad podría evolucionar en una depresión clínica.

Síntomas de la depresión situacional

De acuerdo con Mayo Clinic, los signos de un trastorno de adaptación pueden incluir:

  • tristeza
  • no disfrutar cosas que solían gustarte
  • llanto frecuente
  • preocupación, nerviosismo y ansiedad
  • problemas para dormir
  • falta de apetito
  • dificultad para concentrarse
  • sentirse abrumado
  • dificultad para llevar a cabo actividades cotidianas
  • aislamiento
  • no cumplir con actividades importantes, como ir a trabajar o pagar las cuentas
  • pensamientos o comportamientos suicidas
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Tratamiento de la depresión situacional

Imagen Shutterstock

En este punto, los expertos coinciden en que el mejor camino es la terapia psicológica con un terapeuta o grupos de apoyo. En algunos casos también se hace necesario el uso de medicación para acompañar la terapia. Los síntomas suelen disminuir en el curso de seis meses, aunque pueden no hacerlo si no se recibe tratamiento.

De acuerdo con el sitio web PSYCOM, lo peor que puedes hacer cuando pasas por un trauma es seguir con tu vida como si nada. Tómate un momento para sanar y busca ayuda, o tu salud mental te obligará a hacerlo más tarde.

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