¿Por qué Bridgerton 2 tiene menos escenas candentes que la temporada 1? Te explicamos

La primera temporada de ‘Bridgerton’ fue un éxito rotundo desde su estreno a finales de 2020. El escándalo de la alta sociedad de Londres, la incisiva Lady Whistledown y el tórrido romance de Daphne y el duque de Hastings nos cautivaron por completo.

En especial, la relación de Daphne y Simon conquistó a la audiencia por su intensa química, pasión y sí, escenas candentes.

La apasionada intimidad que gozó la pareja en esta primera temporada se coronó como un factor distintivo de la serie de Shonda Rhimes, el cual muchos fans creían que iba a volver a protagonizar la segunda entrega, pero no fue así. Te explicamos por qué.

¿Por qué 'Bridgerton' temporada 2 tiene menos escenas íntimas que la 1?

La temporada 2 de ‘Bridgerton’ nos presentó una historia de amor diferente a la de Daphne y Simon. La búsqueda de Anthony por la esposa perfecta dejó de lado la intimidad sexual y nos mantuvo al filo al asiento con el triángulo amoroso entre el vizconde y las hermanas Sharma.

Esta trama provocó que el sexo pasara a un segundo plano y fuera más bien la tensión sexual entre Kate y Anthony, interpretados por Ashley Simone y Jonathan Bailey, lo que imperó principalmente en su relación.

En el caso de Daphne y Simon, su romance tuvo un punto muy importante que fue el despertar sexual de la joven Bridgerton y la guía de Simon en este aspecto. Por ello, las escenas de sexo tenían razón de ser.

No obstante, en el caso de Anthony, el vizconde ya había tenido su despertar sexual desde hace mucho.

Por ello, en la segunda temporada su personaje no se desarrolla en esta línea, sino en otra que igualmente tiene una carga importante de intimidad: aventurarse en el amor.

En este sentido, el creador de la serie, Van Dusen explicó en una conferencia de prensa que las escenas de sexo en ‘Bridgerton’ siempre tienen una razón de ser en la historia, y en esta segunda temporada no eran tan relevantes para el desarrollo de la relación de Anthony y Kate.

Descubrir y aceptar sus sentimientos hacia Kate, quien igualmente se mantiene renuente hacia lo que siente por Anthony, nos sumerge en un romance mucho más lento, pero eso no quiere decir que sea aburrido.

Las miradas intensas, roces fortuitos y una atracción magnética entre el vizconde y Kate nos generan múltiples situaciones en donde parece que están a punto de caer en la pasión, pero no lo hacen.

En este sentido, Van Dusen explicó que esto hace que la serie sea “increíblemente sexy”.

Además, de acuerdo con Ashley, la personalidad de sus personajes, el deber que tienen con su familia y su honor también provocan que el sexo no hubiera tenido sentido en las primeras etapas de su relación.

Jonathan Bailey también cree que la tensión sexual entre su personaje y el de Kate también permite explorar la intimidad de pareja desde otra perspectiva, más allá de la carnal, lo cual también ayuda a que la audiencia tenga una idea de qué esperar en las siguientes temporadas.