Gisella Perl y su impactante historia como ginecóloga de Auschwitz

Todos hemos escuchado alguna vez las horribles historias sobre el campo de concentración de Auschwitz y los horribles experimentos de Josef Mengele. Sin embargo, no todos conocen el relato de Gisella Perl, quien trabajó como ginecóloga junto a este doctor, siendo testigo de varios horribles crímenes. Perl, una doctora judía, logró salvar a cientos de mujeres con sus conocimientos, pero en vez de ayudarlas a tener a sus hijos como hizo Stanislawa Leszczyńska, ella realizó numerosos abortos.

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La historia de Gisella Perl

En un contexto como el del campo de concentración, tener un hijo era peligroso para las mujeres. En muchos casos resultaban víctimas de experimentos horribles por parte de Mengele o de violencia extrema. Fue así que con su conocimiento en ginecología Perl las ayudaba a abortar, salvando así su vida.

Gisella Perl era una gran ginecóloga y estaba casada con un cirujano. Sobrevivió en Auschwitz, pero perdió a su esposo e hijo además del resto de sus familiares cercanos, excepto una hija pequeña que se ocultó con una familia no judía.

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¿Cómo logró salvar tantas vidas?

En Auschwitz se le encomendó la tarea de reportar a Mengele qué mujeres llegaban embarazadas al campo de concentración. En un comienzo, el doctor le dijo que esas personas estarían a salvo en otro campo de concentración, especial para el cuidado de la madre y el hijo. Perl sabía que era una mentira, porque había visto con sus propios ojos las experimentaciones.

Algunas mujeres que se enteraron de la conversación se entregaron por su cuenta con la esperanza de salvarse, pero fueron víctimas de Mengele, quien realizaba vivisecciones donde la madre estaba consciente de los horrores practicados sobre su cuerpo. Todas murieron en el proceso, como Perl anticipó que sucedería.

Si las mujeres daban a luz, no había forma de esconder al niño sin que llorara y finalmente todos serían castigados con la muerte. Si eran entregadas a Mengele también morirían, así que comenzó a practicar abortos a escondidas, sin ningún tipo de calmante y con las pocas herramientas de las cuales disponía.

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Problemas éticos

Está claro que Gisella Perl enfrentó varios problemas éticos, por un lado, su crianza religiosa que le impedía estar a favor de los abortos. Por el otro, muchos consideraron que estaba ayudando a los nazis en el campo de concentración. Es difícil dar una respuesta certera al asunto, pero está claro que esas mujeres podrían haber muerto si eran descubiertas.

Si quieres saber más sobre su historia, existe una película titulada Out of the Ashes que cuenta sus dificultades en Auschwitz así como los juicios que tuvo que enfrentar siendo acusada por complicidad con los nazis.

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