Cada país del mundo parece sujeto a una serie de clichés en ocasiones falsos y, en otras, rabiosamente verdaderos. Este último es el caso de la especial relación entre los rusos y el vodka, una bebida cuyas cantidades son ingeridas con facilidad por los habitantes de las tierras frías mientras algunos de nosotros apenas podríamos consumir cuatro vasos sin terminar sufriendo una resaca histórica.

En muchas ocasiones, nos complicamos la vida buscando difíciles recetas de cócteles con los que sorprender a nuestros invitados. Sin embargo, lo simple puede ser mucho más fácil de hacer, y al mismo tiempo, puede llegar a dejarte sin palabras por sus deliciosos sabores. Y eso es lo que queremos demostrar hoy con la variante que te presentamos del cóctel Moscow Mule.

Las formas de beber alcohol son muchas y variadas. Los jóvenes ya están aburridos de hacerlo siempre de la misma manera y buscan nuevas alternativas para disfrutar de su trago favorito de una forma diferente. Esto suena muy divertido, siempre y cuando no abusen de las técnicas.

Seguramente haya algunos tragos que se prestan más para ciertas situaciones y celebraciones que otros. Y en este caso, a todas aquellas que sois fútboleras, o que queréis sorprender a parejas y amigos amantes del deporte, os presentamos una combinación perfecta para ver los partidos en casa.

El vodka es una de esas bebidas clásicas que combinan con un montón de refrescos y zumos, pero que especialmente casan bien con los naturales y los cítricos. Precisamente por ello, creo que te va a encantar nuestra receta de hoy de vodka con limonada casera que preparamos con una presentación exquisita.

El negocio de los tragos ha crecido tanto que ya no es trata de vender una simple botella de vodka. Ahora se juega mucho más en cada compra. La competencia es tan grande que las marcas deben luchar por diferenciarse y, en esa guerra de botellas originales para llamar la atención, el consumidor sale beneficiado con hermosos diseños de botellas.