Mucho se ha hablado ya sobre las grandes diferencias entre los universos cinematográficos de Marvel y DC, la vieja rivalidad de los cómics que inevitablemente se ha trasladado a la pantalla de la mano de dos estudios que han definido (o intentado definir) los rasgos característicos y diferenciales de su franquicia.

Justice League, una película de superhéroes que sin ser excepcional ni maravillosa resulta entretenida y efectiva en sus propósitos de delinear lo que vendrá en el Universo extendido de DC, ha tenido que pagar las dificultades iniciales de la franquicia, lo que desembocó en una oleada desmedida de críticas negativas y en un desempeño taquillero muy decepcionante.

Todos vimos Justice League con nuestra carga de expectativas a cuestas, y aunque algunos quedamos más satisfechos y otros más dolidos, vale decir que el amplio abanico de sus personajes nos permitió seleccionar claramente favoritos y de los otros...

Justice League hizo su debut en la pantalla grande y los comentarios y críticas de fans y detractores no tardaron en aparecer. Opiniones encontradas chocaron como el puño de cualquiera de los justicieros contra el rostro de un parademon. Internet hirvió a favor y en contra, como suele hacerlo en estas ocasiones.

Justice League, también conocida como la The Avengers del DCEU, aunque no es una comparación que despierte simpatía entre los fans de DC Comics (lo sentimos, pero fueron Warner Bros. y Zack Snyder los que llamaron al director de las dos primeras Avengers para terminar su película), incluyó a diferencia de las demás películas de la franquicia —excepto Suicide Squad— escenas en los créditos.

Si Flash y Superman se echaran una carrerita ¿quién ganaría? Esa es una pregunta que ha revivido gracias a Justice League en donde *SPOILEEERS* podemos ver en una escena post créditos una carrera para determinar quién es más rápido.