Las malas decisiones son cosas que suelen suceder, incluso en cadenas de tv multimillonarias como FX. Hoy en día sabiendo el éxito mundial que supuso Breaking Bad, a cualquier persona sobre la faz de la tierra le parecería una gran locura rechazar un show de tal magnitud. Pero no fue tan fácil cuando Breaking Bad solo era un montón de guiones y libretos sobre un escritorio.

Con el honor de ser prácticamente la única serie de horror puro (que no sea parte de un subgénero como vampiros o zombies) y su artilugio de una historia independiente en cada temporada, American Horror Story sigue cautivando al público y siendo una de las series más exitosas de la TV estadounidense.

El universo X-Men tiene una tradición de series de TV enormemente exitosa y todavía más longeva que su popular contraparte cinematográfica, pero todas ellas eran hasta ahora animadas, explotando las grandes posibilidades que este formato da a los superpoderes mutantes.

Sons of Anarchy se mantiene hasta hoy como una de las series más vistas del canal FX en Estados Unidos en toda en su historia, superando a otros grandes dramas de la cadena como The Shield y Nip/Tuck.

Desde hace mucho tiempo los fanáticos de American Horror Story han notado diferentes pistas y elementos que sugieren que todas las temporadas de la serie, aunque aparentemente independientes entre sí, guardan una profunda conexión y ocurren en un mismo y bizarro universo, uno que contiene fantasmas, alienígenas, brujas, demonios y espíritus sobrenaturales de toda clase.

Si hay una cosa que American Horror Story y su producción hacen realmente bien, eso es la creación de un atrapante misterio y una inevitable intriga ante lo que vendrá en cada nueva temporada.