Un niño perdió la vista en uno de sus ojos luego de que un compañero de escuela le arrojara una escuadra directo al rostro, en medio de una batalla campal en la que no estaba participando.
Un niño queda ciego de un ojo luego de que un compañero de escuela lanzara una escuadra que le atravesó el párpado y el globo ocular
El trágico incidente ocurrió en un aula de su colegio cuando se desarrolló una pelea campal, en la que la víctima ni siquiera participaba. A pesar de ser sometido a varias cirugías, los médicos no pudieron hacer nada para que el menor no perdiera la vista de uno de sus ojos.

Tomás, un alumno de sexto curso en el Colegio Valle-Inclán de Oleiros en la provincia española de La Coruña, estaba cerca de la pelea multitudinaria que se armó en la escuela en un día lluvioso de noviembre, sin imaginar que su vida estaba a punto de cambiar, contó La Voz de Galicia.
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Le atravesó el párpado y el globo ocular
Luego de terminar una partida de ajedrez, Tomás se acercó a ver cómo sus compañeros se lanzaban escuadras y otras reglas en un momento en el que su profesor los había dejado sin vigilancia.
En un momento en el que se había acercado al radiador del aula porque tenía frío, una escuadra impactó en su ojo, atravesándole el párpado y el globo ocular, provocando un sangrado abundante que conmocionó a los presentes.
Al escuchar los gritos de los niños, los profesores se acercaron hasta el aula y, al descubrir lo que había ocurrido, llamaron a los servicios de emergencias, quienes trasladaron al menor al Hospital Abente y Lago.
En el centro médico, el estudiante fue operado de emergencia tras notar que tenía destrozada la córnea, la pupila y el cristalino de su ojo, antes de ser llevado al Institut de Microcirurgía Ocular de Barcelona, contó La Vanguardia.
Durante tres días, el menor fue sometido a varias cirugías, con la intención de salvarle el globo ocular, aunque todo esfuerzo terminó siendo en vano.
Los padres denunciarían a la escuela
Desde la tragedia, ambos padres de Tomás han dejado de trabajar debido a que el menor necesita atención durante las 24 horas del día.
A pesar de que los papás de la víctima aseguran que toda su vida ha cambiado de manera radical, lamentaron la actitud de las autoridades escolares al querer hacer ver lo ocurrido como una simple fatalidad.
Al no encontrar empatía por su hijo, los padres de Tomás decidieron ponerse en manos de un abogado porque se sienten “desamparados”, a pesar de que la escuela les ofreció una compensación patrimonial, que para ellos no es suficiente.
“Nos estamos quedando sin nuestros ahorros (…), alguien tiene que hacerse responsable y no descartamos ir a la vía judicial ordinaria”, explicaron ante el rotativo.
