En un sucio ático lleno de heces y vómitos: rescatan a un joven con autismo encerrado durante siete meses por su madre y padrastro

En noviembre de 2019, Mathew Langley, un joven autista de 22 años, fue encerrado en un ático por madre y padrastro, Lorna y Craig Hewitt, donde permaneció durante siete meses en condiciones deplorables e insalubres.

Una denuncia provocó que el 2 de junio de 2020, la policía llegara hasta una casa de Sheffield, Reino Unido, donde hallaron a Langley al borde de la muerte, al estar gravemente bajo de peso y deshidratado.

El joven, consumido en el cruel encierro, pesaba tan solo 39 kilogramos y sobrevivía entre heces, vómitos y un nivel de suciedad que indignó a las autoridades.

Langley, quien durante toda su vida ha padecido de intestino irritable, incontinencia, artritis y dificultades de aprendizaje, fue trasladado de emergencia a un hospital con un cuadro clínico sin precedentes, según los propios doctores.

Gracias al esfuerzo de los doctores, Langley pudo ser reportado físicamente estable un mes después.

Luego de que la madre y el padrastro de la víctima fueron arrestados, las autoridades iniciaron un proceso en su contra que los encontró culpables en enero pasado de encarcelar falsamente a una persona vulnerable y de causarle daños.

Sobre el caso, el juez Slater fue tajante al decir que la pareja simplemente abandonó el cuidado del joven, a quien simplemente dejaron “consumirse en el ático” durante meses, con la puerta cerrada durante gran parte de ese tiempo.

“Debió haber pasado esos largos siete meses experimentando sentimientos de ansiedad, confusión, hambre y soledad”, afirmó, luego de recordar que el joven fue hallado con heridas en manos y rodillas, debido a que se la pasaba a gatas dentro de ese cruel espacio.

Un mes después de haber sido declarados culpables, la pareja fue condenada a seis años de prisión.