Un hombre fue condenado a 30 años de prisión por asesinar el martes pasado a su abuela, a quien propino una fatal golpiza para robarle el dinero que había conseguido de la venta de sus golosinas.
Mató a golpes a su abuela de 80 años para robarle el dinero. La anciana vivía de vender golosinas
Aunque el hombre escapó de la casa de su abuela, de 80 años, tras matarla a golpes, a los tres días se entregó a las autoridades y fue sentenciado a 30 años de prisión.
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Aunque el sentenciado escapó tras el homicidio, Benito Pinto Mendizábal se entregó el viernes a las autoridades en Santa Cruz, Bolivia, lugar en el que cometió el asesinato, contó Unitel.
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La familia de la Emiliana Mendizábal, de 80 años, sospecha que el hombre estaba bajo la influencia de las drogas cuando mató a la mujer.
Los allegados de la abuela solicitaron a las autoridades aplicar mano dura y sentenciar de una manera ejemplar al joven, quien supo su condena tras un juicio abreviado el mismo viernes.
Luego de haberse entregado, las autoridades revisaron las grabaciones de las cámaras de seguridad de la zona, en las que pudieron captar que el condenado entra y sale en dos ocasiones de la vivienda de la víctima durante el día de su muerte.
“Fue la única persona que entró ese día”, dijo Betty Pinto, una de las hijas de la víctima.
Además, la mujer dijo que el sentenciado se compró un celular y ropa, tras matar a su mamá y que incluso intentó salir del país.
Pide disculpas: “espero que me perdonen”.
Tras ser condenado por parricidio, Pinto emitió una declaración en la que solicitaba el perdón de sus allegados porque “no estaba con mis cinco sentidos” cuando cometió el delito, señaló Página Siete
“Estaba todo drogado, no sabía lo que estaba haciendo y espero que toda mi familia me perdone”, dijo.
No era la primera vez que el sentenciado agredía o robaba dinero a su abuela, quien vendía en el mercado de La Ramada.