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Un hombre que participó en la tortura y asesinato de su nieto pasará 120 años en prisión

Las autoridades hallaron videos en los que varios miembros de la familia del menor lo lastimaban de varias formas desde decirle groserías, rociarlo con agua y golpearlo con varios objetos.
11 Ago 2021 – 08:25 PM EDT
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El pequeño James 'Alex' Hurley, de 12 años, fue encontrado muerto el pasado 3 de febrero del 2020 en Montana, con múltiples heridas y contusiones en todo su cuerpo. Y aunque las autoridades sospecharon en un principio de sus propios familiares -incluido su abuelo-, ellos se defendieron al decir que el niño se había auto flagelado; una teoría que pronto quedaría descartada por completo.

Tras las primeras averiguaciones, los oficiales encontraron que varios miembros de la familia del menor, quien vivía en casa de su abuelo desde la muerte de su padre, poseían videos en los que lastimaban física y verbalmente a Hurley quien soportó que le dijeran groserías, lo rociaran con agua y le pegaran con varios objetos.


Tras el suceso, las autoridades arrestaron a cinco personas involucradas en el asesinato y tortura del niño: su abuelo James Sasser Jr.; la esposa de este, Patricia Betts; su hijo de 14 años, James Sasser III; su hija de 18, Madison; así como Gage Roush, también de 18, pero sin ninguna connotación familiar con la víctima.

Luego de más de un año del incidente, el abuelo del niño, James Sasser Jr. aceptó un acuerdo de culpabilidad por homicidio deliberado, poner en peligro a un menor de edad y manipular a un testigo, por lo que será condenado a 120 años en una prisión.


Al igual que el abuelo del niño, Sasser III se declaró culpable de un delito grave de homicidio deliberado y permanecerá encarcelado hasta los 18 años. Por su parte, Madison Sasser -quien se encuentra testificando contra sus familiares- aceptó el cargo de secuestro agravado, por lo que permanecerá en libertad condicional hasta que cumpla 25 años, explicó el Bozeman Daily Chronicle.

A diferencia de los demás miembros de la familia, Patricia Betts -quien está detenida sin derecho a fianza- se declaró inocente de los cargos de homicidio deliberado, secuestro agravado y poner en peligro a un menor. Los fiscales han dejado claro que pedirán la pena de muerte contra la mujer.

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