Un bebé murió el pasado domingo a tiros en una playa, durante un ataque en el que fallecieron cuatro personas, incluido el papá del menor.
Un bebé de un mes muere en los brazos de su padre en medio de un tiroteo en el que fallecieron otras tres personas
Los primeros indicios de la averiguación en Salvador, Brasil, determinaron que el crimen, que ocurrió el pasado domingo, habría sido motivado por una situación vinculada con el tráfico de drogas.
Por:Univision
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Los primeros indicios de las autoridades en Salvador, Brasil, determinaron que el crimen ocurrió alrededor de las 02:30 p.m. y que habría sido motivado por una situación vinculada con el tráfico de drogas, explicó Correio.
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La Policía Civil indicó que los atacantes llegaron en coche hasta un lugar en la playa, donde se encontraba el objetivo primordial, junto a otras personas, antes de abrir fuego desde el vehículo.
Las autoridades llegaron al lugar tras recibir el reporte sobre el tiroteo, donde encontraron a cuatro personas sin vida que fueron identificados como Jonas de Santos de Oliveira, de 28 años; Joilson de Souza Silva, de 36; Bruno Roberto Galvão, de 35 y el bebé Bryan Cerqueira Galvão, quien había cumplido un mes, tan solo un día antes.
Además, los servicios paramédicos hallaron a dos personas heridas, quienes fueron trasladadas a un hospital, desde donde no se ha dado a conocer sobre su estado de salud.
La corporación dijo en un comunicado que Jonas de Santos de Oliveira, un exagente de la policía, era el objetivo principal del comando armado al estar involucrado en el mundo del tráfico de estupefacientes.
Un vecino del lugar, quien no quiso proporcionar su nombre, le dijo a G1 que escuchó tanto ruido producido por los numerosos disparos que creyó “que era una bomba”.
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Tras verificar que no su vida no corría peligro, el hombre se acercó hasta el sitio del ataque donde encontró la sangrienta escena en la que estaba “el padre con su bebé en el regazo”.
La investigación, a cargo del Comando Operaciones de la Policía Militar (COPPM), intenta establecer los pormenores de lo ocurrido, en medio de los residentes locales.
“Todos estamos con miedo y ha prevalecido la ley del silencio porque no se puede hablar demasiado”, dijo el testigo anónimo.
La zona ha sido aislada por el COPPM y por agentes del Departamento de Policía Técnica (DPT).