Hacía tiempo que Linda Frickey había decidido que en abril de este año, ella y su marido se jubilarían para pasar más tiempo con su pequeña nieta de seis años en Nueva Orleans.
Cuatro adolescentes intentan robar el auto de una abuela y terminan matándola: sus padres los entregaron a la policía
"Tomaron una decisión increíblemente difícil y quiero elogiar a los padres por hacer lo correcto (…) a pesar de que es muy doloroso entregar a tu propio hijo por algo que sabes que no le enseñaste”, dijo la policía.
Por:Univision
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Con eso en mente, la mujer de 73 años se había propuesto disfrutar el último mes como empleada de Security Plan Insurance, sin imaginar que cuatro adolescentes le arrebatarían de tajo aquella ansiada jubilación, contó la cadena WDSU.
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El pasado lunes, Frickey salió de trabajar cuando fue interceptada por cuatro adolescentes que pretendían robarle su vehículo. El atraco salió tan mal que la mujer quedó con gran parte de su cuerpo por fuera del coche, mientras su mano estaba atorada en el cinturón de seguridad.
A pesar de ver que la mujer estaba en esas condiciones, los insensibles secuestradores echaron a andar el automóvil, arrastrando a Frickey por más de una manzana en el área de Mid-City , hasta que su brazo atorado en el cinturón se desprendió y quedó sin vida en el asfalto.
Luego de que las autoridades se enteraran del suceso que conmocionó a toda la comunidad que consideraba a Frickey como una buena persona dedicada a ayudar a los demás, un adolescente de 17 años y tres mujeres de 16 y 15 años fueron señalados como los autores del fatal incidente.
En un acto valorado por la policía, los padres de tres de los cuatro involucrados entregaron o ayudaron a arrestarlos, antes de que la última involucrada se entregara por su cuenta al día siguiente.
"Tomaron una decisión increíblemente difícil y quiero elogiar a los padres por hacer lo correcto (…) a pesar de que es muy doloroso entregar a tu propio hijo por algo que sabes que no le enseñaste”, dijo el Superintendente de la Policía de Nueva Orleans, Shaun Ferguson, en una conferencia de prensa.
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La cuñada de la víctima, Kathy Richard, le dijo a Fox8 que Frickey no se merecía este final porque debía “haber vivido 100 años para continuar ayudando a todo el mundo” y lamentó que no tuvo “la oportunidad de ver a su hijo casarse el próximo año” ni de ver crecer a su nieta.
Los cuatro adolescentes, de quienes no se han dado a conocer sus identidades por tratarse de menores de edad, han quedado tras las rejas.