Denuncian que por no hablar inglés un restaurantero fue catalogado como "indigente" en un hospital

La familia del mexicano Domingo Alavez alega que un centro médico en California no lo está atendiendo adecuadamente y que lo confundió con un inmigrante desamparado porque solo habla español. El hospital niega las acusaciones.

Domingo Alavez fue internado de emergencia en el Fountain Valley Regional Hospital, en California, el 26 de junio de 2020.
Domingo Alavez fue internado de emergencia en el Fountain Valley Regional Hospital, en California, el 26 de junio de 2020.
Imagen Cortesía Guille Reyes

Domingo Alavez es conocido entre la comunidad mexicana del sur de California como un inmigrante que alcanzó el sueño americano, porque hace más de 20 años llegó a este país sin un centavo en el bolsillo y gracias a su esfuerzo logró abrir su propio restaurante de comida oaxaqueña.

PUBLICIDAD

Pero su familia denuncia que desde el 26 de junio un hospital lo tiene catalogado como indigente, porque él no habla inglés y no ha podido comunicarse con el personal médico. Alavez, de 60 años, ingresó por un problema en el apéndice, fue operado de emergencia y ha permanecido aislado durante varios días.

El centro médico que lo atiende, Fountain Valley Regional Hospital, localizado en la ciudad del mismo nombre, en el condado de Orange, también recibe pacientes de coronavirus.

“Hoy (martes) me llamó desesperado para decirme: ‘estoy perdiendo fuerzas, llevo cinco días sin comer, tengo hambre y sed’”, afirmó su exesposa Guille Reyes, quien es una reconocida activista proinmigrante en California, en una entrevista telefónica con Univision Noticias.

“No lo atienden, lo tienen aislado. Ni una gelatina le dan. Está recibiendo un trato inhumano”, lamentó.

Domingo Alavez es dueño de un restaurante de comida oaxaqueña en California.
Domingo Alavez es dueño de un restaurante de comida oaxaqueña en California.
Imagen Cortesía Guille Reyes


Alavez fue intervenido quirúrgicamente poco después de que llegó al hospital hace 18 días. Su exesposa señala que su recuperación ha sido complicada y que ahora tiene una infección grave. “Él me dice: ‘es que aquí no me hacen caso, no quieren ayudarme’”, denunció ella.

La comunicación entre ambos ha sido constante. Según Reyes, en una videollamada vio a su exmarido “en condiciones infrahumanas” y teme que no lo estén atendiendo adecuadamente por darle prioridad a los contagiados de coronavirus. Esta alegación ha sido rechazada por el hospital.

Esta mujer que trabaja en una funeraria y colabora en el programa de repatriación de fallecidos por coronavirus, organizado por el gobierno mexicano, descubrió que lo consideran un paciente desamparado cuando llamó a la clínica para preguntar cómo estaba. “Hablé pidiendo información de él y me dijeron ‘¿el homeless?’. Yo les he dicho que necesito hablar con alguien que hable español y me cuelgan”, aseguró.

PUBLICIDAD

En una de las llamadas telefónicas que recientemente recibió, Alavez le comentó que buscaría atención en otro lugar, pero su debilidad le impide salir por su propio pie. “Se está muriendo en vida”, denunció ella y dice que ha tratado de visitarlo en la clínica, pero le advierten que no la dejarán pasar por las medidas sanitarias implementadas debido a la pandemia.

Video En El Centro, foco del coronavirus en California, acondicionan carpas para atender a pacientes contagiados

La versión del hospital

A través de un comunicado enviado a esta redacción, el Fountain Valley Regional Hospital indicó que leyes de privacidad le impiden proporcionar información sobre un paciente o caso específico. Pero sí aseguró que ofrece un trato digno a cada una de las personas que atienden.

"Seguimos las órdenes de los médicos y contamos con dietistas profesionales apropiados que ayudan a pacientes que requieren un apoyo especial", indicó el centro médico en la declaración escrita. "Todos los pacientes reciben el mismo nivel de excelente atención", subrayó.

Domingo Alavez y Guille Reyes se casaron en su natal Oaxaca y emigraron a Estados Unidos en 1996. Su sueño era trabajar para construir una casa “grande” en su tierra y comprar una camioneta pick-up. “Esa era nuestra ilusión”, contó ella. Pero aquí el matrimonio, que procreó un hijo que ahora tiene 36 años, se separó.

Fruto de su esfuerzo, Alavez logró más de lo que buscaba y hace unos 15 años abrió un restaurante de comida oaxaqueña al que llamó ‘Moctezuma’, en honor al emperador azteca. El negocio está en Santa Ana, una de las ciudades con más inmigrantes mexicanos en EEUU, y tiene capacidad para 40 clientes.

PUBLICIDAD

“Él trabajaba día y noche”, lo describe Reyes, quien esta semana perdió a su padre en México por una complicación médica. “Ayer enterraron a mi papá y ahora tengo este problema”, dijo con lágrimas.

El restaurante ‘Moctezuma’ ha permanecido cerrado desde el inicio de la pandemia en marzo y aún no hay fecha para su reapertura. El gobernador Gavin Newsom ordenó el lunes que este tipo de negocios volvieran a cerrar en las regiones con alto registro de contagios de covid-19.

Mira también: