Informe del Congreso: Trump cobró tarifas exorbitantes al Servicio Secreto por el uso de su hotel en Washington

El expresidente y candidato presidencial republicano Donald Trump fue acusado de haber cobrado al Servicio Secreto sobreprecios de hasta un 300% por el uso de habitaciones en su hotel en Washington DC y de haber aceptado “cientos de pagos inconstitucionales y éticamente sospechosos” a través del Trump International Hotel entre 2017 y 2018.

Las acusaciones están contenidas en un informe de 58 páginas resultante de un investigación de un año adelantada por los demócratas del Comité se Supervisión de la Cámara de Representantes que indagó sobre la administración del hotel por parte de la Organización Trump en vista de los problemas éticos resultantes de la negativa del entonces presidente a separarse de sus negocios mientras ejercía el cargo.

Sobreprecios para el gobiernos federal y descuentos para otros

“El Sr. Trump ha dejado en claro que no solo se negará a desinvertir en sus empresas en una posible presidencia futura, sino que buscará multiplicar las oportunidades de comercializar la Oficina Oval para su enriquecimiento personal, convirtiendo miles de empleos de la administración pública en puestos clientelares”, dijo el demócrata de mayor rango en el Comité de Supervisión, el representante por Maryland, Jamie Raskin.

El hijo del expresidente Eric Trump ha sostenido que la organización le cobraba al Servicio Secreto una tarifa con descuento y que cualquier beneficio obtenido la compañía por ese concepto fue reembolsado al gobierno federal a través de un pago anual voluntario al Departamento del Tesoro.

“A pesar del cuento chino contado por Eric Trump de que los agentes del Servicio Secreto de Estados Unidos “se alojan en nuestras propiedades de forma gratuita”, el hotel de Donald Trump estafó repetidamente al Servicio Secreto de Estados Unidos, cobrándole mucho más que las tarifas diarias aprobadas por el gobierno e incluso muchas veces por encima de las tarifas cobradas a cientos de clientes, incluidas algunas de las habitaciones alquiladas por la familia real qatarí e intereses comerciales chinos", señaló Raskin.

El informe señala, por ejemplo, que “el 8 de noviembre de 2017, cuando Donald Trump Jr. se hospedó en el hotel del expresidente Trump en Washington DC” los registros obtenidos por el comité de Mazar, los contadores de la Organización Trump, “muestran que, efectivamente, al Servicio Secreto se le cobró la asombrosa tarifa de $1,185 por dos habitaciones esa noche” mientras que rentó “200 habitaciones a partes privadas a solo $125 o $170 cada una”.

“El hotel del presidente Trump no solo le cobraba al Servicio Secreto mucho más que las tarifas autorizadas por el gobierno federal, sino que también le cobraba a la agencia mucho más que a cientos de otros clientes, incluidos miembros de una familia real extranjera y un interés comercial chino”, afirma el informe.

El informe también señala que el 28 de noviembre de 2017, “se aprobó una exención para una tarifa de habitación de $600 cuando la tarifa diaria oficial para ese mes era de solo $201. Los registros de habitaciones que Mazars presentó al Comité muestran que, esa misma noche, el Trump International Hotel en Washington, D.C. alquiló más de 80 habitaciones a tarifas inferiores a $600 por habitación, incluido el alquiler de una docena de habitaciones a Inner Mongolia Yitai Coal Co., Ltd., una corporación privada con sede en China, por $338.85 cada una.

La Clásusula de Emolumentos

El informe también señala pagos realizados por funcionarios públicos, federales y estatales, alojados en el hotel, y otras personas que obtuvieron favores de Trump, incluidos puestos federales en su administración e indultos presidenciales.

En los 11 meses de registros de huéspedes del hotel obtenidos por el comité se encontraron 16 ejemplos de funcionarios públicos, algunos de ellos en viajes oficiales, lo que según el informé es una posible violación a la cláusula de emolumentos de la Constitución.

El informe señala que “más allá de un salario, el presidente no puede recibir ningún pago adicional de los gobiernos federal o estatales. Se trata de una prohibición irrenunciable de explotar el cargo para convertir y embolsarse fondos públicos”.

Los republicanos de la Cámara de Representantes rechazaron el informe calificándolo de “noticias viejas”. “El informe de hoy es más basura reciclada de la investigación infructuosa y casi de una década de los demócratas sobre el presidente Trump” dijo la portavoz del Comité de Supervisión, Jessica Collins, el cual está controlado por los republicanos.

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