La cantidad de personas que han pedido el subsidio por desempleo bajó nuevamente en la semana finalizada el 6 de junio, a 1.54 millones, o su menor nivel desde que se agudizó la pandemia a mediados de marzo. Sin embargo son cerca de 44 millones de personas las que han recurrido a esta ayuda en un mercado laboral al que le tomará años regresar al punto en el que se encontraba antes de la inédita crisis.
Vuelven a caer los pedidos del subsidio por desempleo en EEUU, pero millones siguen sin un trabajo
Otras 1.54 millones de personas pidieron la ayuda por desempleo en la semana finalizada el 6 de junio, la menor cifra desde que arreció la pandemia, reportó el Departamento del Trabajo. Sin embargo son ya 44 millones de personas las que han recurrido a este subsidio en medio de la inédita crisis.
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El informe de mayo divulgado la semana pasada por el Departamento del Trabajo mostró que el mercado laboral posiblemente logró pasar ya la peor parte, al sorprender con la creación de 2.5 millones de puestos de trabajo. Ello en medio de la relajación de las restricciones que obligaron amplios cierres que prácticamente habían paralizado por semanas la economía.
Pero el nivel al que las personas siguen necesitando la ayuda por desempleo sigue en un nivel sin precedentes en el rango de los millones.
"Los pedidos del subsidio por desempleo están bajando de forma sostenida. Los pedidos iniciales cayeron en 355,000, a 1.542 millones en la semana al 6 de junio. Las solicitudes de la ayuda por desempleo durante la pandemia (conocida en inglés como el Pandemic Unemployment Assistance) también bajaron en el mismo lapso, de 797,000 a 706,000", dijo Maria Cosma en un análisis de Moody's Analytics.
Asimismo, los pedidos de este subsidio de forma continua, es decir por quienes aún no logran obtener un trabajo, también cayeron en 339,000, a 20.9 millones, agregó Cosma.
El camino a una recuperación del pleno empleo en Estados Unidos aún está comenzando, advirtió la Reserva Federal este miércoles. El banco central estadounidense proyectó que la tasa del desempleo cerraría este año en un 9.3%, muy por debajo del 13.3% actual pero un dato cercano a los dos dígitos y en un nivel históricamente alto.
Esto porque "la persistente crisis de salud pública seguirá pesando fuertemente sobre la actividad económica, el empleo y la inflación", explicó.
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