El Paso pide ayuda porque su morgue no da abasto por el número de muertos por covid-19
Las autoridades de El Paso, Texas, han enviado un comunicado la noche de este jueves en el que piden la ayuda de personas para trabajar en su morgue debido al dramático aumento de muertes causadas por la pandemia del covid-19.
“Los asistentes en la morgue serán provistos de equipo de máxima protección (PPE) y serán sometidos a una prueba de covid-19 antes de comenzar su labor”, reza el comunicado. “ Además del esfuerzo físico de esta labor, lleva también un costo emocional”.
La petición llega después de que el condado tuviese que recurrir a prisioneros encarcelados por delitos menores para ayudar a transportar los cuerpos de los fallecidos por la pandemia. Las personas que respondan al llamado del condado este jueves no los reemplazarán, afirmó el juez del condado Ricardo Samaniego.
“No cualquiera puede hacer esta labor. Hemos tenido a personas que han aguantado una hora, 30 minutos, la mitad del día”, describió. “Es un proceso muy difícil”.
Samaniego también espera la respuesta de la Guardia Nacional de Texas sobre la petición que hizo El Paso para que envie unidades a la morgue para ayudar con el transporte de los fallecidos. Esto, en una comunidad donde la mayoría de la población ( un 82%, de acuerdo con estimaciones de la oficina del censo de 2017) es de origen hispano.
“Nos han pedido un informe de nuestra situación y se los hemos enviado”, explicó Samaniego. “ Está en sus manos determinar si pueden o no venir a El Paso para ayudarnos con los muertos”.
La ciudad fronteriza con México ha registrado más de 78,000 casos de covid-19 desde el inicio de la pandemia, según datos del Departamento de Salud de Texas. El Paso tiene la tercera cifra de contagios más alta del estado, aun cuando sus 800,000 habitantes representan una cuarta parte (un 26%) de Dallas/FortWorth y apenas un 16% de la población del condado de Harris (Houston).
Hasta este jueves, hay cerca de 35,000 casos activos de covid-19 en el condado de El Paso y la pandemia ha costado la muerte de por lo menos 876 personas.
El llamado para pedir más ayuda viene una semana después de que una corte de apelaciones de Texas derribara el intento de Samaniego de cerrar negocios no esenciales por petición del fiscal general Ken Paxton apoyado por un grupo de empresarios restauranteros. Su argumento sostiene que la orden de restricción, que buscaba evitar más contagios, no respetaba las órdenes del gobernador texano, Greg Abbott.
Las autoridades locales se defienden de las críticas de Abbott
Abbott ha sido crítico con la orden, y ha dicho que Samaniego “no hizo bien su trabajo” por intentar cerrar negocios para evitar el aumento de casos de coronavirus en su condado.
El gobernador repitió sus palabras en una conferencia de este jueves, y dijo que los oficiales no han seguido las órdenes “de forma adecuada”. Abbott repitió también que no tiene intenciones de restablecer una orden de restricción estatal, aun cuando Texas registra un ritmo de aumento de casos sobre el 10%, la cifra que el gobierno texano consideró lo suficientemente grave como para hacer obligatorio el uso de mascarilla en todo el estado.
Samaniego dijo que las críticas de Abbott no atienden el problema. “Creo que nuestro condado ha hecho un buen trabajo, nuestros alguaciles han estado muy activos. La mayoría de los bares y restaurantes de El Paso que han sido abiertos lo han hecho por indicaciones de la policía, no de la oficina del sheriff”. También defendió que el condado decidiera utilizar a prisioneros en las tareas de la morgue. “Era esa opción o hacer que las familias esperen más tiempo para comenzar a organizar los funerales de sus muertos”.