Rompió el "cochinito" y así montó su 'carwash' en el Alto Manhattan

A propósito del mes de la mujer, hacemos honor a aquellas dignas representantes que ponen en alto al género y a la comunidad latina.

Ximena Gualpi, dueña de Gretchel Carwash, rompió su “chanchito” o “cochinito” para montar su propio negocio familiar hace un mes en Manhattan.

Tras escapar del machismo hace 7 años de su natal Riobamba, Ecuador, llego con el único objetivo de darles una mejor vida a sus 4 hijos. Trabajo en un salón de uñas, donde dice conoció a mujeres que la apoyaron y sobre todo que la alentaron para no dejarse caer.

Al igual que muchos, a ella la pandemia la dejo sin un sueldo fijo, ya que los clientes no recurrían al servicio y esto la puso en aprietos hasta para pagar la renta.

De acuerdo al NY Nail Salon Workers Association el 79% de las empleadas de salones de uñas ni siquiera cobran el salario minomo que actualmne es de $15 la hora.

No fue hasta el encuentro que tuvo con una amiga dominicana, a la que ella agradece de corazón, que se le prendió el foco para montar su negocio.

Ni corta ni perezosa,ahorró por 6 meses para comprar sus herramientas de trabajo porque para ella " las mujeres podemos y no dependemos de nadie".

Sus hijos no tenían fe en el negocio, pero ella nunca dudo de sus capacidades. Lento pero seguro se ha hecho de un nombre y los clientes ahora le llueven.

Sus familiares, al igual que ella, pasaban por la misma situación y como ella dice “entre mujeres hay que apoyarse’ y les dio la mano a su hija y a sus primas.

Para Gualpi, los sueños no tienen límites y espera un día en convertirse en una gran empresaria y a apoyar a mujeres quienes algún día pasaron lo mismo que ella.

Si quieres emprender tu propio negocio, hay organizaciones en la Gran Manzana que te echan una mano, para más información aquí.