Un adolescente hispano baleado por la Policía buscaba acabar con su vida, según las autoridades

El joven de 16 años llevaba un arma falsa con la que habría apuntado a los agentes para que le dispararan.

Oficiales del LAPD presentaron una foto de la pistola falsa que presuntament apuntó un hombre hispano durante un mortal enfrentamiento con agentes del orden.
Oficiales del LAPD presentaron una foto de la pistola falsa que presuntament apuntó un hombre hispano durante un mortal enfrentamiento con agentes del orden.
Imagen Los Angeles Police Department

LOS ÁNGELES, California.- El joven hispano baleado mortalmente por agentes de Los Ángeles la tarde del domingo en el sur de la ciudad “usó a la Policía para acabar con su propia vida”, declaró el jefe de LAPD, Charlie Beck

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Este jueves, el hispano fue identificado por la Oficina del Forense de Los Ángeles, se llamaba Daniel Pérez y tenía 16 años.

La Policía de Los Ángeles (LAPD) dio a conocer en una conferencia de prensa este jueves que Pérez llamó a la corporación para reportar que estaba armado.

El jefe de LAPD explicó que cuando los oficiales le pidieron al sospechoso que se detuviera entre la calle 48 y la avenida Ascot, este se giró contra ellos y les apuntó con un arma.

Beck calificó el suceso de “tragedia“ y dio a entender que el joven buscaba la respuesta que consiguió por parte de los agentes.

Video Policía de Los Ángeles dio a conocer el video de la persecución de Carnell Snell Jr

Beck aseguró que el vídeo grabado por la cámara corporal que portaban los agentes muestra cómo ocurrieron los hechos, pero no tiene intención de revelar las imágenes al público por el momento.

Los oficiales respondieron a tiros a la amenaza e hirieron de muerte al joven de 16 años. Tras revisar el arma que llevaba, se reveló que era falsa.

“La punta naranja de la pistola falsa había sido pintada para ocultar que se trataba de una réplica”, dijo Beck.

Pérez fue la segunda víctima en morir a manos de la policía en el Sur Los Ángeles el fin de semana pasado. La tarde del sábado, un joven identificado como Carnell Snell Jr., murió tras una persecución.

La muerte de Snell causó varias protestas en esa parte de la ciudad. Los manifestantes exigieron un alto a la brutalidad policiaca.

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