Cómo unos tamales arruinaron la cena de Navidad de decenas de familias en Los Ángeles

La masa de maíz mal preparada por un conocido establecimiento de comida tradicional mexicana está detrás de este desastre culinario.

Video Al menos 40 familias denuncian que su cena navideña comprada en la Amapola salió dañada

LOS ÁNGELES, California.- Para decenas de familias en Los Ángeles la cena de Nochebuena se convirtió en una pesadilla culinaria luego de que su esperado festín de tamales caseros quedara arruinado por una masa de maíz en malas condiciones vendida por un conocido comercio de productos hispanos y que fue descrita por los frustrados consumidores como “incomestible”, “quebradiza”, “mantecosa” y “porquería aceitosa”.

Los relatos del ‘tamalazo navideño’ –todos muy similares- han proliferado durante los últimos dos días en las redes sociales. Tan solo en Yelp, la empresa que distribuyó la masa, La Amapola, acumuló más de 60 críticas negativas en su tienda de Downey con fecha del 24 y 25 de diciembre, algunas de las cuales incluyen testimonio gráfico del desastre gastronómico.

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Numerosos clientes se personaron a pedir explicaciones ante las puertas de La Amapola en Downey durante el domingo con sus tamales sin cocinar. Fueron allá con las ollas donde trataron de cocerlos sin éxito durante largas horas, cerca de diez en algunos casos. A pesar de que la gerencia de la empresa se disculpó por lo ocurrido y aseguró que se hará cargo de devolver el dinero a los afectados, el mal trago que pasaron muchos consumidores en fechas tan señaladas hace que la indignación aún continúe.

“Arruinaron la Navidad”, “la peor experiencia de mi vida” o “Cómo Amapola robó la Navidad” son algunas de las expresiones empleadas por los clientes para expresar su enfado.

“En esta ocasión, por causas ajenas a nosotros, tuvimos este desafortunado inconveniente”, se lee en una nota publicada por la compañía en su página de Facebook, donde se garantiza el reembolso y se asegura que se tomarán “acciones concretas”.

El gerente de La Amapola, Carlos Galván Jr., indicó a Univision Noticias que hubo “procesos en el cocido del maíz (para la masa) que no se siguieron”. “Estamos investigando”, añadió.

La culpa es de la masa

La Amapola tiene (o tenía) una buena reputación entre la comunidad hispana de Los Ángeles. Es uno de esos lugares que la gente recomienda a los amigos que buscan productos de calidad para sus platillos tradicionales. Fundado en 1961 por una familia de inmigrantes mexicanos (de Guadalajara) ha crecido hasta tener cuatro establecimientos en el condado de Los Ángeles.

Tal es su popularidad que para muchos residentes es una tradición comprar la masa para sus tamales de Navidad en esas tiendas. Tal es la demanda que se forman filas en la calle para adquirir ese producto. Entre los afectados hay personas que dicen haberse gastado hasta 150 dólares en masa para hacer unos tamales que terminaron en la basura.

Las familias se dieron cuenta de que algo no iba bien cuando los tamales no terminaban de cocerse.

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“Duramos dos o tres horas con la masa. Mis amigas, seis horas”, dijo Xóchilt Serrano a Univision a las puertas de La Amapola. Allí otros hablaban de ocho horas, incluso diez.
Después de la incredulidad inicial vino la frustración del cocinero, luego el sentimiento de culpa.

En vídeo: el Departamento de Salud investiga el caso de los tamales

Video Departamento de Salud investiga caso de masa de tamales vendida en mercado Amapola de Downey

Los tamales se resquebrajaban, tenían un aspecto blando, grasiento. Muchas familias se quedaron sin cena de repente. Algunos recurrieron a encargar unas pizzas o a comprar hamburguesas en un establecimiento de comida rápida.

“Nuestra abuelita lloraba porque había estropeado la cena”, dice Carlos en su queja en Yelp. Hay más testimonios así. Luego se empezó a correr la voz. Cuando las familias se enteraron de que su caso no era el único, la tristeza se tornó en un enfado con La Amapola.

Hubo consumidores que contaron a los medios de comunicación que los que se atrevieron a probar los tamales vomitaron y sufrieron diarrea .