HOUSTON, Texas. - La señora Luz María Villa estaba durmiendo cuando de repente su cama se levantó y el movimiento la tiró al piso. “Estaba yo acostada, así (muestra cómo), y al levantarse la cama fui a parar abajo”, detalló.
"¿Quién me va a ayudar?": el reclamo de una damnificada por explosión en una fábrica en Houston
Luz María Villa, una de las personas afectadas por el estallido que también cobró la vida de dos hombres, asegura no tener dinero para pagar las reparaciones que se deben hacer en su hogar y pide que la compañía Watson Grinding & Manufacturing la indemnice.

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Ella es una de los cientas de personas que no solo sintieron el fuerte estruendo tras la explosión en la fábrica Watson and Grinding Manufacturing durante la madrugada del viernes 24 de enero, sino que también resultaron con daños en sus viviendas.
“La ventana de enfrente, que es grande, está (dañada) y (también) el foundation (los cimientos)”, dijo.
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Su vivienda presenta muchas otras averías y ella asegura que no tiene cómo pagar por las reparaciones. “Son gastos que no esperaba hacer y dinero que no tengo”.
Ella ahora es una de al menos 60 personas que están demandó a la fábrica bajo el argumento de que son “ellos quienes necesitan cubrir esos (gastos), porque quién me va a ayudar, quién me va a pagar”, reclama.
Otros damnificados también están considerando demandar, como es el caso de la señora Josefina Rodríguez, quien sostiene que “es necesario que se hagan responsables de lo que pasó, no solo a mí, sino a toda la gente”.
Por ahora, Luz María ha tenido que proteger sus ventanas dañadas con plástico y desconoce cuánto será el costo de los daños a su vivienda o el tiempo que tomará recibir una compensación.
“Ella está buscando una indemnización por los daños causados a su casa para que le quedé como estaba”, dijo Rob Kwok, el abogado de la damnificada. “Los obligaremos a que se hagan responsables por lo que hicieron”, agregó.
La masiva explosión borró casi por completo la planta industrial de Watson and Grinding Manufacturing y acabó con la vida de Frank Flores y Gerardo Castorena, empleados de la empresa que habían llegado al lugar primero que todos los empleados.
Tras el incidente, 450 inmuebles resultaron afectados, según el conteo más reciente por parte de autoridades. 35 de las propiedades presentan averías severas.
En el único comunicado por parte de la fábrica hasta el momento señalaron que trabajan forma diligente para resolver la situación y cooperan con las autoridades.
Esas palabras para damnificados como Luz María no bastan por ahora.
“Si llueve, de aquí a mañana va a llover, yo no tengo dinero para poner mis ventanas”, comentó.
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