HOUSTON, Texas. - El Departamento de Policía de Houston (HPD) anunció el arresto de Frederick Jackson, de 19 años, y Anthony Jenkins, de 21, que enfrentan cargos enfrentan cargos de asesinato con posibilidad de pena capital por la muerte del oficial de Nueva Orleans, Everett Briscoe, que fue baleado cuando estaba con unos amigos en un restaurant del área de Galleria el sábado 21 de agosto.

Las autoridades no dieron a conocer la forma como se determinó que los hombres estaban involucrados en el tiroteo que dejó también a una persona más herida.

Durante la conferencia de prensa el viernes 27 de agosto, casi una semana después del tiroteo, la fiscal de distrito del condado Harris, Kim Ogg, indicó que los dos hombres contaban con historial delictivo y estaban libres bajo fianza.

Historia original

Las autoridades de Houston ofrecen 100,000 dólares de recompensa para hallar a los responsables de matar a un detective de la policía de Nueva Orleans, el pasado sábado 21 de agosto en un restaurante.

El aumento de la recompensa se debe en parte a la donación que hizo el empresario multimillonario Tilman Fertitta, dueño de los Houston Rockets y varios restaurantes.

El detective Everett Briscoe estaba junto a unos amigos en el restaurante Grotto, en el área de Galleria, cuando dos sospechosos se acercaron para intentar robarlos, según dijo la policía.

Briscoe murió en la escena mientras que otra persona fue herida de bala, siendo ingresado en condición grave a un hospital.

La policía describió que uno de los sospechosos vestía suéter negro con pantalón de mezclilla, mientras el otro usaba suéter blanco con pantalones negros. Ambos huyeron del lugar en un auto Nissan Altima, color gris, con placas de papel.

Aunque Sylvester Turner, alcalde de Houston, dijo el domingo que la recompensa subía a 10,000 dólares, la contribución de Fertitta hizo que ahora sea de $100,000, según se dijo en una rueda de prensa.

Además del aporte para aumentar la recompensa, Fertitta anunció que a través de su empresa "Landry's Inc" donaban un millón de dólares al Departamento de la Policía de Houston.

Se unió a la policía en el 2008

Everett Briscoe, de 41 años, era detective de la unidad de homicidios en Nueva Orleans. El pasado sábado 21 de agosto, estaba en un restaurante del área de Galleria, al oeste de Houston, cuando dos hombres intentaron robarlo a él y a las personas que lo acompañaban.

Durante el intento de robo, los sospechosos dispararon a Briscoe y a una persona más. El detective fue declarado muerto en la escena mientras que la otra víctima fue ingresada al hospital en condición grave.

"Perdimos a un oficial bueno. Él siempre procuraba organizar eventos para la comunidad. Estamos trabajando con su esposa para que el cuerpo pueda ser trasladado", dijo Shaun Ferguson, jefe de la Policía de Nueva Orleans.

Briscoe era padre de dos hijos y se había unido al departamento policial de Nueva Orleans en el 2008.

280 homicidios en lo que va de año

Con este asesinato, ya son 280 homicidios ocurridos en lo que va de 2021 en la ciudad de Houston. En comparación al 2020 es un aumento del 27%, según datos oficiales. "Estamos pagando tiempo extra para tener a más oficiales en las calles", dijo el alcalde Turner sobre los esfuerzos que están haciendo para intentar reducir la cifra de muertes violentas.

El mandatario recalcó que también es importante la denuncia que haga la comunidad cuando tenga alguna pista sobre el paradero de un sospechoso.

A pesar de los altos números, el jefe de la Policía de Houston dijo que los crímenes estaban bajando y que ahora la prioridad es encontrar a estos dos sospechosos de matar al detective Briscoe.

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