HOUSTON, Texas. – Tras la afortunada aparición de Christopher Ramírez, son muchas las preguntas que surgen sobre las posibilidades que un niño de solo 3 años haya podido sobrevivir de la manera en que este menor lo hizo perdido en el bosque.
Expertos explican cómo pudo sobrevivir Christopher Ramírez cuatro días perdido en un bosque
Especialistas aseguran que lo importante en estos casos es mantener la calma e intentar hidratarse. El niño, de 3 años, estuvo perdido por más de 72 horas en una zona boscosa. Las autoridades investigan todas las posibilidades.
Muchos dicen que fue intervención divina el que Christopher pudiera regresar a casa sano y salvo después días de estar perdido en los bosques del condado Grimes.
Los médicos fueron los primeros en sorprenderse de lo bien que apareció Christopher. “Un niño que pasa tres días sin líquidos y sin alimentos, estaría en una inanición”, dijo Martin Yudovich, pediatra.
Nino Correa, jefe de búsqueda y rescate en Puerto Rico y que adiestra a otros rescatistas en Texas, dijo que mientras más pasa el tiempo más aumenta el riesgo para la persona desaparecida. Ante la pregunta si Christopher pudo sobrevivir sin ayuda, este experto responde: “Un bebé de esta edad puede resistir un poco más que un adulto, estamos hablando de cinco días, quizás seis sin comer, lo importante es la hidratación”.
Si caminamos por la zona boscosa donde fue hallado el niño, el tener que refugiarse pudo ser un gran problema para Christopher de solo 3 años. Los expertos dicen que tuvo mucha suerte en cuanto al clima que está muy templado. Durante el día no hace demasiado calor y en la noche no hay mucho frío.
Fue también afortunado de no encontrar ningún animal en la espesa maleza. Eran varios los peligros que le rodeaban mientas estaba perdido, pero es posible que a su corta edad no haya desarrollado aún un sentido de peligro y eso pudo ayudarle en no preocuparse demasiado.
“Sí hay algunos tipos de animales que están programados en el cerebro como víboras, arañas y tiende a ser instintivo de que no nos acerquemos, pero no todo el mundo lo tiene”, dijo Rob Arteaga, psicoterapeuta.
Fue un final feliz, pero la enseñanza es que al mantener la calma puede hacer la diferencia entre la vida y la muerte. “Las personas que entran en pánico son normalmente las que no sobreviven”, aseguró Arteaga.














