DALLAS, Texas. Fiscales Federales revelaron que Lizbeth Prieto, de 19 años, conocida también como Lizbeth Escamilla, y Christian López, de 24 años, fueron acusados a nivel federal de distribuir sustancias controladas en la ciudad de Carrollton.
Pareja hispana es acusada de distribuir fentanilo y ocasionar la muerte de una adolescente en Carrollton
Golpe al narcotráfico en el norte de Texas: Lizbeth Prieto y Christian López fueron acusados de distribuir fentanilo en Carrollton, droga que ocasionó la muerte de una adolescente de tan solo 15 años. Suman cuatro menores de edad en la ciudad, víctimas de sobredosis.

La pareja hispana está en la mira de las autoridades, señalados de suministrar el fentanilo que ocasionó la muerte de una adolescente de 15 años. La cuarta muerte por esta potente y silenciosa droga en el lugar en menos de un año.
Según los reportes por parte de las autoridades, López suministró las mortales pastillas a Pietro, quien se las proporcionó a la víctima, una estudiante de Newman Smith High School, identificada como “JG”.
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Familiares de la víctima, la encontraron inconsciente y boca abajo en su cama
El pasado martes 13 de junio, familiares de la joven la encontraron inconsciente y boca abajo en su cama, después de llamar al 911, equipos de emergencia la trasladaron a un hospital cercano donde fue declarada muerta por sobredosis.
En la habitación de “JG”, los detectives encontraron al menos diez pastillas de Percocet falsificadas con la inscripción M-30, que dieron positivo en pruebas de fentanilo.
En su cuenta de Instagram, hallaron conversaciones con Prieto, de apenas 24 horas antes de la muerte. En los mensajes, Pietro supuestamente ofrecía venderle unas 13 pastillas de fentanilo por solo 100 dólares.
La acusada le confirmó a la víctima que podía pagar en efectivo, y comentó que iba a ir hasta su casa para entregarle en persona las pastillas.
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Acusados cayeron en una trampa, gracias a un agente encubierto
Siguiendo las pistas, un agente encubierto se comunicó con Pietro para una transacción parecida. Policías la empezaron a seguir y vieron cómo se subió al auto de López, momentos después se reunió con el agente y le entregó varias pastillas.
El agente encubierto le pagó con billetes marcados. Luego de seguirla de nuevo, notaron que se subió al auto de López. Ambos fueron capturados.
Lizbeth Prieto confesó que Christian López era su proveedor, y reconoció que le vendió las pastillas a la adolescente. De ser declarados culpables, cada uno de ellos, Pietro y López, podrán pasar hasta 20 años tras las rejas en una cárcel federal.
“Esto va mucho más allá de un problema en Carrollton, es un problema que nos afecta a todos”, declaró Eduardo Chávez, agente especial de la DEA en Dallas. "Una sola pastilla puede cambiar tantas vidas para siempre. Nunca dejaremos de buscar justicia", concluyó
La fiscal federal Leigha Simonton agregó que se trata de “cuatro jóvenes vidas perdidas en un instante. Cuatro familias destrozadas”.
El gobernador de Texas, Greg Abbot, firmó hace tan solo unas semanas un juego de cuatro leyes que establecen cargos de asesinato a distribuidores o fabricantes de fentanilo, en caso de que se registre una muerte.
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