La administración de Donald Trump retiró una demanda civil en contra de Southwest Key Programs, el proveedor de refugios para niños migrantes acusado de múltiples abusos sexuales y casos de acoso en sus instalaciones. Además, el gobierno federal anunció que dejará de usar los servicios de esa empresa. La demanda había sido interpuesta durante el gobierno de Joe Biden. Te puede interesar: ICE ha detenido a más de 32,000 inmigrantes durante el gobierno Trump, asegura DHS.

Un niño de 4 años fue declarado muerto en un hospital de Nueva York luego de ser llevado de emergencia por una posible exposición al fentanilo en un refugio. Los padres señalaron que cerca del menor había drogas, por lo que se encuentran bajo custodia de la policía, pero aún no enfrentan cargos. Mira también: Hallan cuerpos descuartizados en una carretera de México: pertenecen a seis estudiantes desaparecidos.

El alcalde de Nueva York, Eric Adams, informó que el refugio para inmigrantes que operó en el icónico Hotel Roosevelt en Manhattan, cerrará sus puertas. El lugar logró acoger entre 350 y 400 personas por semana y aún da hogar a decenas de familias que, se espera, sean reubicadas en otros albergues en las próximas semanas. Te puede interesar: Gobierno Trump pide a ICE rastrear a menores que ingresaron solos a EEUU: ¿para qué los buscarán?

El Departamento de Servicios Humanos y miembros de la comunidad operarán los refugios principalmente para personas sin hogar, pero también abiertos para cualquier ciudadano.

Este lunes comenzó a funcionar el centro que atenderá a migrantes deportados por EEUU en Ciudad Juárez, México. El albergue tiene capacidad para recibir a 2,500 personas y cuenta con una cocina comunitaria para entregar cerca de 7,500 comidas. La policía local y la Guardia Nacional estarán encargadas de la seguridad. Te puede interesar: Newsom desafía al gobierno Trump al destinar $50 millones para proteger a inmigrantes: así serán distribuidos.

Desde la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca, albergues del condado Pima no han recibido a ningún solicitante de asilo. Esta situación ha generado inconvenientes financieros, por lo que al menos dos de estos albergues se han visto obligados a cerrar sus puertas pese a llevar años de funcionamiento.