Si tu hijo ya está listo para dejar el pañal y has comenzado su entrenamiento para ir al baño, no todo será tan sencillo. Los niños muchas veces pueden tener miedo de usar el inodoro. ¿Qué hacer para afrontar estos miedos? Presta atención a lo que sigue.
Tips para que tu hijo le pierda el miedo a usar el inodoro

Una de las razones por las que los niños le tienen miedo a hacer sus necesidades en el inodoro, es por temor a ser succionados por éste. Como madre sabes que tal cosa no ocurrirá, pero debes ser paciente y entender que en la mente e imaginación de tu hijo, es probable que eso ocurra.
Muéstrale a tu hijo para qué sirve el inodoro
Recuerda que tu hijo está conociendo el mundo. Enséñale qué es el inodoro y cómo funciona. Por ejemplo, delante de tu hijo vierte el contenido del pañal o la bacinica en el inodoro para enseñarle que es allí a donde van los desechos.
Después de lograr que tu hijo se sienta cómodo en el baño, es momento de pasar a la siguiente fase. Para que tu hijo comience a perderle miedo a usar el inodoro, puedes comprarle una tapa de inodoro para niños. Estas tapas vienen con diseños infantiles y son del tamaño necesario para que los niños se sienten en el inodoro sin que les sobre espacio -lo que muchas veces les genera la sensación de que se van a caer dentro-.
También puedes comprar decoraciones para el cuarto de baño con dibujos alusivos a sus personajes favoritos, de esta manera él se sentirá más cómodo.

Crea una rutina entretenida para ir al baño
Una vez que tienes la tapa de inodoro infantil, puedes comenzar con el hábito de acompañar a tu hijo al baño y sentarlo en el inodoro durante algunos minutos, una vez cada día. Puedes leerle un libro, o permitirle llevar un jueguete o crayones y papel para dibujar. Lo que se busca con esta práctica que el pequeño comience a perderle miedo al inodoro.
Otra forma de motivar a tu hijo a ir al baño es utilizar un frasco de recompensas. Cada vez que tu hijo haga sus necesidades en el inodoro, coloca una canica en el frasco. Una vez que el frasco esté lleno será momento de canjearlo por algo que le guste a tu pequeño.
Sigue estos consejos y muy pronto tu pequeño le perderá miedo a ir al baño. La próxima vez que golpees la puerta del cuarto de baño para saber quién está dentro, oirás su tierna voz diciendo “Mami, ya está”.









