Cuando solo éramos hijas, es posible que viéramos la vida de diferente manera y pensáramos que el amor que nos tenía nuestra madre era lo normal porque la vida así lo determina. Pero una cosa es recibir el amor de una madre y otra es tener y sentir el amor de madre; no es lo mismo que nos quieran como hija a querer como madre.
Ser mamá nos cambia emocionalmente de estas 5 maneras

Hoy quiero hablarte de algo muy importante que nos ocurre a todas las mujeres únicamente cuando somos madres. Me refiero a esos cambios emocionales que nos genera la maternidad.
#1 Tienes un nuevo respeto por tu madre

Ahora sabes lo que es pasar por el embarazo, el parto, y querer a un hijo más que a nada en este mundo. Sabes cual es la sensación que tiene ser madre y que serías capaz de hacer cualquier cosa por proteger a tus hijos.
Por esas experiencias ahora entiendes a tu madre y sabes cuanto te quiere.
#2 Piensas en el futuro

Es un buen estilo de vida no pensar en el futuro y vivir en el presente únicamente cuando no se tiene hijos. Pero al ser madre sabes que vives el presente para ser feliz, pero que para avanzar como familia también debes pensar en el futuro.
Sabes que por unos cuantos años, la vida de tus hijos depende de ti, y por eso debes ahorrar y pensar en vivir de forma saludable. Tú eres quién les mostrará un camino como referente en la vida.
#3 Te sientes más fuerte

Sientes que eres más fuerte en todos los aspectos pues has traído a tus hijos entre el dolor y lágrimas. Cada día te das cuenta de todas las cosas que puedes hacer y al mismo tiempo ejercer el rol de madre.
Descubres que tienes una fuerza que no sabías antes que tenías, da igual lo cansada que estés, si tu hijo te necesita estás a su lado.
#4 Tus emociones crecen

Tienes que ser fuerte emocionalmente y además debes ser una persona emocional, ¿por qué? Porque tus hijos necesitan tu ejemplo para aprender a controlar sus emociones, necesitan tu serenidad para sentirse protegidos, necesitan tu seriedad para entender las normas, y necesitan todo tu amor para sentirse queridos.
#5 Eres más humilde

Con la maternidad has aprendido a ver las cosas con otros ojos, no te vanaglorias de tus buenas cualidades como persona sino que siempre aceptas los consejos que recibes para mejorar.
La maternidad nos cambia la vida a todas las mujeres y en todos los sentidos. Tal vez los cambios emocionales sean los menos visibles, pero a la larga son los que más necesitamos para ser buenas madres.









