Desde que mi hijo nació he aprendido mucho, desde cambiar pañales e identificar un resfriado hasta cómo atender y cuidar a un niño con paladar hendido.
Niños con paladar hendido: mi experiencia como mamá


Alimentación
Desde que nació, como a muchos otros padres en casos similares, me advirtieron de lo difícil que iba a ser alimentarlo. Los niños con paladar hendido no pueden succionar, ya que no crean ese vacío necesario para dicha acción, por ello su alimentación debe ser diferente.
Puedes ayudarte con lo siguiente:
Mamilas especiales. Las encuentras en algunos sUpermercados, en México y Estados Unidos las venden en Walmart, de marca Pigeon, son mamilas suaves con chupón especial que facilitan la salida de leche y así el bebé no tiene que esforzarse en succionar.
Otra opción es darle de beber a tu bebé por medio de cucharadas, aunque es un método muy tardado, es mejor que verlo intentar alimentarse sin logro.
Abrir el chupón más de lo normal fue una medida desesperada pero efectiva, los chupones ordinarios tienen una abertura muy pequeña, ya que el trabajo lo hace el bebé al succionar y jalar el líquido a través de ésta. Pero para los niños con paladar hendido esa tarea es imposible; abrir el chupón los ayuda a obtener la leche o agua por el orificio sin esfuerzo.
Cualquiera que sea la técnica que elijas, siempre podrás seguirlo alimentando de leche materna, utiliza un saca leche y hazlo de forma regular, aunque tu bebé no pueda succionar, acércalo a tu seno y deja que lo intente para seguir estimulando la producción. No hay nada como la leche materna, aunque por lo regular los bebés con paladar hendido requieren de fórmula también.
Posteriormente su dieta deberá ser completamente blanda hasta que se le cierre el paladar con cirugía o use un paladar provisional que impida la comida se le vaya por la abertura.
Cirugías de paladar hendido
Hablando exclusivamente del paladar, (ya que hay casos con labio leporino) tener a un cirujano maxilofacial de cabecera será muy importante, será él quien te indique los tiempos de cierre y tratamientos.
En el caso de mi hijo, lo que me recomendaron fue hacer el primer cierre del paladar blando al año y medio, seguido de terapias de lenguaje y masajes comprobando la eficacia de esta primera intervención.
Posteriormente el cierre del paladar duro se hace después de los 4 años y antes de los 6, dependiendo el desarrollo del niño, ya que antes de esta cirugía, se requiere que la cara y huesos tengan cierta madurez.
Independientemente de esto, hay que poner mucha atención en los dientes del pequeño, pues es muy común que vengan chuecos o haya infecciones y caries por el mismo paladar abierto.
Cuidados especiales
Los niños con paladar hendido requieren de ciertos cuidados especiales desde su primer día de vida fuera del vientre.
No deben dormir nunca con la espalda plana, es decir, necesitas siempre tenerlos en posición inclinada con la cabeza en alto, esto porque si llegasen a regurgitar o vomitar es más fácil mantener sus vías libres y evitar que broncoaspiren.
Logra esta posición colocando almohadas para mantener su cabeza elevada, colocarlo en el porta bebé para sus siestas o bien como yo hacía, dormirlo en mi pecho mientras me colocaba semi acostada.
Otra cuidado es el de mantener siempre su nariz despejada; al principio cada vez que mi hijo comía algo lo sacaba por la nariz. Si esto te pasa, lo mejor es tener siempre una toallita y una pera (saca flemas) a la mano para limpiarle de inmediato, esto se corrige después de la primer cirugía y con la misma madurez del bebé.
Si tienes o conoces a un niño con paladar hendido, no dudes en compartir experiencias.








