null: nullpx
comunicación padres e hijos

Mi hijo mayor tiene celos de su hermanito recién nacido ¿qué puedo hacer para evitarlo?

Publicado 17 Dic 2020 – 12:36 PM EST | Actualizado 17 Dic 2020 – 12:36 PM EST
Reacciona
Comparte

La llegada de un nuevo integrante a la familia puede ser una situación abrumadora para cualquier pequeñito.

Este importante cambio puede dar paso a la rivalidad entre hermanos, sobre todo cuando se trata de un niño que era hijo único y estaba acostumbrado a recibir todo el cariño y la atención (¿te suena familiar?).

Esto puede manifestarse a través de berrinches, mala conducta y regresiones (dejar de realizar cosas que ya sabía hacer, como ir al baño solo), comportamientos que deben ser controlados para evitar rivalidades a futuro, dice Karen Doherty, autora del libro Sibling Rivalry.

Te mostramos 5 consejos fáciles y super efectivos que te ayudarán a prevenir esta situación y fortalecerán la relación que tienes con tus hijos.

#1 Interacción saludable

Tu primer objetivo es cuidar al bebé. El segundo, enseñarle a tu hijo a interactuar con su nuevo hermanito de manera adecuada, amorosa y sin poner en riesgo su integridad.

Muéstrale que hay distintas formas de convivir y pasar tiempo juntos; por ejemplo, armando un rompecabezas, viendo las caricaturas o jugando con plastilina.

La intención es que se familiaricen entre sí y logren verse como iguales, así será más fácil trabajar en su relación.

#2 Toma en cuenta sus necesidades

Para la mayoría de los padres, es importante tratar a todos sus hijos de la misma forma. Aún así, es común que los niños se quejen de que las cosas 'no son justas' y que no están recibiendo el mismo trato que el otro hermano, sobre todo cuando se trata de un recién nacido.

Para evitar que esto suceda, la Academia Americana de Pediatría sugiere que platiques con tu pequeños para explicarle que sus necesidades no son idénticas y por lo tanto no puedes tratarlos igual ni darles las mismas cosas.

Esto no significa que tengas favoritismos, sino que aprecias las cualidades que hacen especial a cada uno y las tomas en cuenta para que su crianza sea mucho más cariñosa y empática.

#3 El amor es la respuesta

De acuerdo con el sitio especializado Verywell Family, aumentar las dosis de cariño y apapachos puede ayudar a reducir el malestar de tu pequeño y demostrarle que todo es igual que antes.

Dedícale un par de minutos al día y hazle saber que es tan valioso, tierno e importante como su hermanito, y que la única diferencia es que él necesita un poquito más de cuidados, puesto que es un bebé indefenso.

#4 Hazlo parte

No hay mejor manera de estrechar su relación que involucrando a tu hijo en el proceso de crianza. Con mucha paciencia y cariño, enséñale cómo cambiar un pañal, de qué forma se carga a un bebé y cómo arrullarlo adecuadamente.

Esto no solo mejorará su vínculo, también es una excelente oportunidad para que aprenda nuevas tareas del hogar y se vuelva más independiente.

Es probable que se muestre renuente y disgustado al principio; no obstante, es cuestión de días o semanas para que modifique su actitud y sea mucho más amoroso con su hermano menor, pues se dará cuenta de que puede realizar nuevas actividades y se sentirá como un 'niño grande'.

#5 Nunca los compares

Comentarios como «tu hermano es el niño más bonito que conozco» o «deberías de ser tan adorable como él» pueden afectar gravemente sus sentimientos.

Es muy fácil que un pequeño malinterprete tus palabras y piense que no es tan bueno como su hermano.

El Dr. Justin Coulson, psicólogo y experto en crianza, menciona que compararlos provoca que los niños se sientan superiores o inferiores a sus congéneres, lo que transforma su relación en una competencia.

Cada persona es diferente, así que concéntrate en los aspectos positivos y las exigencias de cada uno de tus hijos, en lugar de enfrentarlos. Eventualmente, tu hijo entenderá que no es igual a su hermanito y que ambos requieren de diferentes tipos de atención.

Finalmente, si la rivalidad ocasiona problemas matrimoniales, pone en peligro a algún miembro de la familia, daña el bienestar psicológico de los involucrados o se relaciona con trastornos mentales como depresión o TDAH, será necesario ir con un especialista.

Prueba estas recomendaciones y mantén un ambiente saludable que les permita convivir adecuadamente y sin enfrentamientos.

Después de intentarlo, tus hijos se volverán mejores amigos. Es un ganar-ganar ¿no lo crees?

¿Y tú, cómo manejas la rivalidad entre tus pequeños? Escribe tus mejores tips en los comentarios.

mini:


No te vayas sin antes leer esto:

Reacciona
Comparte