Nadie está nunca lo suficientemente preparado para recibir malas noticias. No importa cuánta fortaleza interior tengamos en el momento en que la vida nos pone de rodillas, en que el dolor golpea con tal fuerza que parece que el aire ya no va a ingresar nuevamente en los pulmones. Las pérdidas, sobre todo la de los seres queridos, son pérdidas que conllevan un dolor, que aunque se comparta, no se alivia. No hay analgésicos ni anestesia para el alma, sólo nos queda el duelo.
La mejor manera de darles a nuestros hijos las malas noticias

Como padres tenemos el instinto natural de querer proteger a nuestros hijos de todo aquello que les pueda hacer daño, de aquellas cosas o sucesos que los puedan hacer sufrir. Pero las tragedias ocurren, la muerte de un ser cercano, de una mascota, la pérdida de empleo, incluso el divorcio, etc, y no podemos inventar un super blindaje para proteger a nuestros hijos.
Por eso, hoy EntrePadres te acerca algunos consejos para saber cómo darles a nuestros hijos las malas noticias.
Enfocándonos en nosotros
Para saber cómo dar una mala noticia a un niño, lo más importante es que primero nos enfoquemos en nosotros mismos, ya que tal vez la mala noticia también nos afecte a nosotros emocionalmente. Debes conectarte con tus propias emociones y centrarte en recuperar tu propia serenidad, antes de hablar con tu hijo. Somos padres, no rocas resistentes a cualquier tempestad.
Ten en cuenta que ellos necesitan de tu tranquilidad, necesitan saber que los amas y estás allí para ellos, aunque sólo necesiten que los abraces, que los acompañes en el silencio, que les tomes las manos, que te encuentres con ellos en el dolor.
Tienes que estar preparado para las diferentes reacciones de tus hijos; algunos pueden llorar, otros permanecer paralizados y otros gritarán o se enojarán.
Frente a las malas noticias: ¿qué decir de acuerdo a las diferentes edades?
Ten en cuenta que los niños pequeños requerirán menos información que los adolescentes, y que luego de darles la información deberás estar preparado para responder sus preguntas, si las tuvieran. Dice un proverbio africano que "uno debe hablar poco y escuchar mucho".
Niños pequeños
Cuando los niños son muy pequeños, hasta los cinco años, procura darles la noticia en un lugar cómodo, si es en tu regazo mejor, y debes estar preparada para que cuando termines de hablar, tu pequeño te pida jugar. No se trata de insensibilidad, simplemente no entienden la magnitud de la noticia.
Niños entre 6 y 9 años
Cuando los niños tienen entre 6 y 9 años, trata de contenerlos compartiendo un tiempo con él llevándolo, por ejemplo, a su lugar preferido. Puedes recurrir también a algún libro infantil que trate la problemática por la que están atrevesando. Los niños a menudo se sienten menos solos cuando leen libros que tienen como protagonistas a otros niños que pasan por la misma experiencia.
Preadolescentes y adolescentes
Nunca tengas miedo de decirle la verdad a tus pequeños, sobre todo si tienen entre los 10 y los 15 años, y ten paciencia con el tiempo de duelo. Si notas que tu hijo se muestra poco comunicativo, recurre a una persona de su confianza para que hable con él y saber así cómo se siente.
Con los adolescentes, deberás estar preparado para brindar más informaciones, si así lo requieren. Conversa con tus hijos acerca de la importancia de buscar apoyo en los tiempos difíciles y de tomar las decisiones correctas en esos momentos.
Mientras encuentres serenidad para contener puedes estar tranquila, ya que después de todo, siempre que llovió paró y después de la tormenta siempre sale el sol.
Comparte en los comentarios cómo afrontaste el momento de darle una mala noticia a tu pequeño. Tu experiencia puede servir a otra mamá.









