Debido a la vida tan agitada que llevamos en este comienzo de siglo, muchas familias han dejado paulatinamente de sentarse a cenar de manera conjunta. Lo que pocos padres saben es que la cena familiar está altamente relacionada con el desarrollo de la salud mental y la estabilidad en la adolescencia. Cuando la familia se reúne a comer se producen beneficios nutritivos, sociales y emocionales.
¿Es importante cenar en familia?

Por:Univision

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Importancia de la cena familiar
Algunos elementos explican por qué es tan importante que la familia se reúna a cenar:
- Cuando adultos y niños comen juntos y disfrutan la compañía del otro, se desarrolla un sentido de pertenencia y de confianza mutua.
- La cena en familia les brinda a los adultos la oportunidad de enseñar buenos modales en la mesa y las opciones nutritivas mejores para la salud.
- Comer juntos estimula las habilidades comunicativas entre adultos y niños, como escuchar pacientemente al otro mientras habla o expresar la opinión propia de modo respetuoso.
- Este tipo de cena le brinda a la familia un espacio de discusión intelectual y moral donde se comparten valores familiares.
- A los niños les sientan bien lasa rutinas, así pues la cena familiar fomenta un sentido de seguridad y estabilidad.
- Si los niños ayudan a preparar la cena, desarrollan habilidades como poner la mesa, cocinar la comida y fregar, entre otras.
- Estas cenas ayudan a cultivar las tradiciones familiares y a realzar la herencia cultural.

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Consejos para gozar de una mejor cena familiar
- Reorganiza creativamente tus planes diarios de modo que puedas incluir en tu agenda la cena con la familia.
- Trata de que las cenas familiares no sean frente al TV, sino en torno a la mesa. Si ya es un hábito, ve gradualmente eliminándolo, comienza por dos días semanales de cena sin televisión y luego ve aumentando.
- Prepara cenas sencillas y fáciles, pero agradables. Ello te dará más tiempo y dejará a todos con ganas de repetir siempre el encuentro.
- Trata de que haya variedad en los alimentos y no obligues a tus hijos a comer un plato específico. Si tu niño no tiene hambre a la hora de la cena, lo ideal es ir poco a poco eliminando las meriendas entre comidas.
- Limita las conversaciones en la mesa a temas neutrales y positivos. Céntrate en las cosas buenas que le sucedieron a los miembros de la familia durante el día.
- Crea un ambiente agradable, puedes poner música de fondo, flores o velas en la mesa, un mantel y losa hermosos, por ejemplo. Todos se sentirán motivados y querrán mantener la rutina de la cena.
La cena familiar no puede ser impuesta, es un encuentro necesario y divertido que debe ser aceptado por todos los miembros del hogar como un espacio participativo y de amor.
Si sigues nuestros consejos, de seguro que puedes lograrlo. Será muy útil para toda la familia.









